Sistema de alerta protege a ribereños
FILADELFIA, Chaco (Marvin Duerksen, corresponsal). Miembros del sistema de monitoreo y alertas tempranas del Pilcomayo destacan que suman 80.000 pequeños y medianos productores a lo largo de la cuenca baja en territorio boliviano, argentino y paraguayo que se están beneficiando con los avisos de alerta. Señalan que, como el Pilcomayo es un río muy especial, con más de 1.000 kilómetros de llanura entre estos tres países, depende en un 95% de lluvias, que hacen incrementar su nivel en pocas horas y su descenso también es rápido.
Además, arrastra volúmenes muy altos de sedimentos: entre 90 millones a 160 millones de toneladas anuales. Estos elementos hacen que el cauce se colmate en forma constante, lo que causa desbordes en ambas márgenes o hacia la margen con más pendiente, y provoca situaciones de emergencia.
Ante esta situación, el Proadapt elaboró en los últimos años mapas de riesgo para anticipar el comportamiento del Pilcomayo.
El sistema de monitoreo y alertas es participativo, integrado por organismos oficiales y pobladores locales. “Con el apoyo de los lugareños, que ya están formados, buscan la forma de comunicar cualquier anomalía, lo cual se interpreta a través del técnico y se devuelva la información a los lugareños. A esta altura, con la concienciación de los pobladores, creo que tenemos una red bastante fuerte en la base para recibir y responder a las alertas que se vienen y alimentar con información al monitoreo”, dijo Verena Friesen, miembro del referido sistema.
Los avisos de alerta se difunden por radios locales, mensajerías, redes de periodistas, entre otros.
Proadapt es un proyecto financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Fondo Nórdico de Desarrollo (FND), en alianza con instituciones públicas y privadas del Gran Chaco Sudamericano.