Intervenciones

Me angustia pensar en la injusticia cometida donde la nueva mayoría hizo gala de su prepotencia pro-impunidad de siete Municipios. Es innegable el pacto de cúpulas y es desolador no poder hacer más que protestar e intentar desnudar ante la ciudadanía el atropello que implicó esta sesión extraordinaria.

Los ciudadanos de Corpus Cristy, Alberdi, Quyquyhó, Quiindy. Mauricio José Troche, Jesús, San Carlos del Apa merecían que en la Cámara de Diputados se debatan seriamente los pedidos formulados en la mayoría de los casos por las Juntas Municipales que denuncian irregularidades que necesitan el aval o rechazo de un equipo auditor serio que se constituya en el sitio y escrute los documentos de la comuna. El pacto era evidente; los legajos se repartían mientras se votaba y fue un gasto de papel al santo botón, pues era sencilla y materialmente imposible de leer sobre la marcha.

Nuevamente el reglamento en su artículo 78 fue violado y la entrega tardía de documentos y datos benefició a los políticos, pues los ciudadanos no obtendrán justicia, ni paz. Lamento ver perdidos los esfuerzos de humildes concejales que hace meses vienen visitando nuestros despachos relatando robos escandalosos de fondos del Fonacide, obras fantasmas, sobrefacturaciones, incumplimiento a la ley de transparencia, nepo- tismo, etc. Ellos peregrinaron como idiotas ante una Cámara de representantes que solo representa a sus intereses partidarios... El resto se puede literalmente morir ante sus ojos.

Trato de encontrar consuelo en esos 15 votos de 80 que dijimos NO al atropello y SÍ a la intervención como un mecanismo de control de gestión, pero no me alcanza el haberlo intentado... Estoy triste y avergonzada, pues las consecuencias de actos irresponsables, cobardes y corruptos son facturas crueles que pagan los ciudadanos, todos en general, pero lo sienten con más impacto aquellos más pobres y vulnerables. Tal vez, alguna vez, entendamos lo importante que es no dar más cheques en blanco a nuestras autoridades.