Niños “solos” ante crecida
Decenas de niños caminan solos cerca del agua ante la crecida del Río Paraguay como se puede observar a simple vista en todos los barrios afectados, sin atención de sus padres o de autoridades.
Los mismos se encuentran vulnerables entre basuras que colmatan sus refugios, las calles y también el agua. En los bañados y la Chacarita, animales como chanchos y gallinas están sueltos y se pasean en medio de la inmundicia, pisan la basura y luego entran a los refugios.
Por si fuera poco, la aparición de víboras se hizo común con las inundaciones. Las mismas están en las aguas, pero luego salen en busca de alimento, momento en que se encuentran con los niños. También los más pequeños caminan sin cuidado entre los camiones usados en las mudanzas. Muchos se ven obligados a entrar a las aguas para traer pertenencias, volver a su casa o acompañar a sus hermanos más pequeños.
Ayer, en el camino al Club Mbiguá, un preadolescente mostró cómo funcionaba su “canoa”, la que era en realidad una heladera que flotaba y cuyos remos fueron hechos de aspas de un ventilador.
Un poblador de la zona, afectado por la crecida, Marcus Rambado, relató que no recibieron ayuda de la Comuna asuncena y que les costó mucho salir del agua. “Apenas salimos. Ahora llueve y con hule intentamos salvar el refugio”, dijo. Agregó que es albañil y se quedó sin trabajo porque tuvo que faltar varios días para mudarse.
La Municipalidad informó que se han sobrepasado las 10.000 familias afectadas por las crecidas.