Preocupa el pronóstico de nuevas lluvias para la zona del Ñeembucú
La alerta emitida ayer por la Dirección de Meteorología para Ñeembucú y Misiones creó preocupación en el duodécimo departamento, que vive un desastre por las lluvias de hace doce días. Además, continúa la riada.
PILAR, Departamento de Ñeembucú (Miguel Ángel Rodríguez, corresponsal). El boletín meteorológico advierte que el área de cobertura del sistema de tormentas que afecta a nuestro país se desplaza al sur de la Región Oriental, zona donde se encuentra uno de los departamentos más afectados por la crecida de ríos y las torrenciales lluvias de hace doce días, es decir, Ñeembucú. Se producirían lluvias con tormentas eléctricas moderadas, ráfagas de vientos fuertes y ocasional caída de granizos en el sur de Misiones y de Ñeembucú, indican las previsiones.
Estos anuncios reactivaron la preocupación de las autoridades y de la población del duodécimo departamento, que desde hace un par de semanas sufren los efectos de las torrenciales lluvias, de la crecida del río Paraguay, así como de arroyos y de los humedales.
El secretario de Gestión de Riesgo de Ñeembucú, Germán Amarilla, manifestó que están atentos al comportamiento del tiempo. Ayer hubo lloviznas que no pasaron a mayores en Pilar, pero en los distritos del sector
sur del departamento, como Mayor Martínez, Villalbín y Cerrito, se registraron grandes lluvias, dijo.
Amarilla refirió que en Pilar, ante un eventual fenómeno similar al del 9 y 10 de mayo, se tiene instalada una motobomba con capacidad de desaguar 10 millones de litros de agua por hora. Junto a las otras máquinas para drenaje se podrá afrontar otra posible inundación en la ciudad, indicó.
Lo que más preocupa actualmente es que el río Paraguay no para de crecer. Ayer subió dos centímetros y llegó a 8,5 metros (la cota normal es de 3,50), quedando a 10 cm del nivel alerta roja. La predicción hidrológica señala que la riada seguirá hasta julio.
Por otro lado, el concejal departamental Emmanuel Cuevas (ANR) dijo que desde el sábado un grupo de jóvenes voluntarios están reforzando la defensa costera de ciudad de Pilar.
El edil añadió que el problema ahora es la dificultad para llegar a las compañías de los distritos del Ñeembucú para llevar víveres a los afectados. Los caminos de acceso están destrozados.