Guitarrista graba su primer disco a los 85 años
“A la guitarra no la podés dejar nunca, porque sino te va a cobrar muy caro. Pero si la acariciás todos los días, te va a dar satisfacción”, así se expresa Kucky Rey que a sus 85 años acaba de publicar su primer disco, que incluye temas suyos y polcas y g
“Durante muchos años me dediqué a las clases, enseñando y actualizándome y nunca me animé a grabar. Ahora estoy entusiasmado. He realizado este disco, con apoyo del Fondec, y quiero hacer dos más”, señala Ramón Ernesto Villalba, quien nació en Resistencia el 7 de junio de 1934, pero desde 1957 vive en Asunción, como el guitarrista Kucky Rey, formador de varias generaciones de músicos.
“Cuando vine, me uní a los folcloristas de la época. De niño ya era Kucky y lo de Rey lo puso el locutor Bernardo Aranda, que en una noche en el estadio Comuneros me anunció así”.
Kucky se nutría del lenguaje del jazz. Tocó con varias orquestas en esos primeros años en Asunción. Integró Los Jockers, Casablanca Jazz, Harmony Club y en el grupo de Tide Smith. Una vez le tocó acompañar al cantante Eduardo Rivas en una presentación en Radio Paraguay. A “Mis noches sin ti” se le ocurrió poner acordes disonantes. Al escuchar eso, el director de la radio, Gerardo Halley Mora, le dijo: “Nunca más va a pasar por esta emisora. Asesina a la música paraguaya”.
“Han pasado muchos años y ha cambiado mucho. En aquel entonces y hoy en día creo que la esencia no se debe tocar, pero la ropa que le ponés armónicamente a la canción, depende de cada uno”, expresa Rey.
“Primero la melodía y después la variación, porque los músicos de antes no hablaban de improvisación, sino de variación. Emilio Bigi, Herminio Giménez, Virgilio Centurión jugaban con las variaciones”.
Kucky Rey comenzó como autodidacta y luego tomó clases con Luis Cañete y con Cayo Sila Godoy. “Cañete tenía un talento enorme. Estaba en el mundo de la dodecafonía. En una clase se aprendía muchísimo con él. Cuando un maestro es bueno, en un mes te puede enseñar lo que otros te enseñan en dos años. Con Cañete analizábamos todo. Nos quedábamos hablando hasta las 2 de la mañana dialogando”, agregó.
“Con Cayo fue diferente. En una fiesta me vio tocar con Tide Smith. Y se acercó me dijo: “Su posición de la mano izquierda es una porquería. Vaya a casa y le voy a corregir. Así empezamos”.
“Yo estoy casado con la guitarra y armónicamente quiero descubrirla más. Pero no hay que casarse con un estilo”, comenta Ramón Ernesto Villalba.