Proteger el Chaco
Los incendios forestales que se registran en nuestro país, y de una manera especialmente grave en la zona del Chaco, debe ser una llamada de alerta sobre el tremendo daño ecológico ocasionado al frágil suelo chaqueño. También sobre la necesidad de urgentes planes y programas de corto y largo alcance para proteger lo que aún queda de la rica biodiversidad de la región.
A inicios de este año, la región occidental era declarada en emergencia por las torrenciales lluvias que inundaron caminos y poblaciones. En menos de cinco meses se presenta otra catástrofe, los incendios que sacuden a la zona y que ya destruyeron miles de hectáreas de bosques y causó la muerte de miles de animales de la rica fauna del Pantanal paraguayo, con epicentro de Bahía Negra.
Las altas temperaturas que se registran en la región adelantaron la temporada de sequía, ya que en tras un corto tiempo los lugares que estaban inundados de aguas ahora son sitios de intensas polvaredas.
Estos extremos naturales se suceden de manera más frecuente en los últimos años y una de las causas son las grandes extensiones de desmontes para el avance de la actividad pecuaria, que actualmente es el puntal de la economía del Alto Paraguay. A la ganadería se suma la contaminación del medio ambiente con el aumento de la población en la región.
A la par de esta triste realidad de destrucción del medio ambiente, es lamentable que no existan planes o programas que tengan como objetivo la protección de lo que queda de la rica biodiversidad chaqueña.
En el Alto Paraguay no existen oficinas ni funcionarios del Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) y del Instituto Forestal Nacional (Infona). Además, las cuatro municipalidades no tienen departamentos de medio ambiente. La gobernación posee una Secretaría del Ambiente, pero es apenas es para completar el cupo de cargo.
El gobierno central cada tanto declara en emergencia a Alto Paraguay cuando suceden desastres naturales, pero lo más sensato sería potenciar el cuidado del medio ambiente chaqueño de manera permanente.