Buscan crear una cámara industrial del cannabis
La empresa Cáñamos del Sur SA, propiedad de Juan Cabezudo, convocó a varios referentes para proponer la creación de una cámara industrial de cannabis e impulsar no solo el uso medicinal, sino industrial y recreativo.
Juan Cabezudo destacó que Paraguay es el único país en el mundo que cuenta con una legislación (Ley Nº 6007 que “Crea el Programa Nacional para el estudio y la investigación médica y científica del uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados”, promulgada en enero de 2018), por la cual el Estado garantiza el acceso gratuito al aceite, y demás derivados de la planta, tras un simple registro. Sin embargo, critica que haya pasado tanto tiempo sin avances significativos, en un país con más de 10.000 hectáreas de cultivos ilegales, con sus nefastas consecuencias.
“Esta ley es una conquista de la sociedad civil, y un derecho prioritario para miles de enfermos sin alternativas en la medicina convencional, quienes hasta hoy deben recurrir al microtráfico para paliar sus dolencias. La población debe informarse sobre los beneficios del aceite de cannabis para paliar más de 29 enfermedades crónicas, incluido el cáncer, y sobre su derecho al acceso gratuito a esta medicina”, dijo.
Por su parte, Cynthia Farina, presidenta de “Mamá Cultiva Paraguay”, señaló que están trabajando en el proyecto de ley de cultivo seguro. “Queremos que los pacientes que necesitan del aceite de cannabis puedan acceder a través de una receta médica visada por el Ministerio de Salud. Y, que este documento ya sirva de aval para que las personas puedan cultivar sin que sean criminalizadas”, dijo.
Actualmente está criminalizado todo lo que es cultivo, tenencia, producción, y por ello los pacientes siguen cultivando en la clandestinidad ya que los aceites que tienen permiso son sumamente caros e inaccesibles.
“Nosotros necesitamos como mínimo 100 gramos de la planta para fabricar un frasco de 30 ml del aceite medicinal que nos va a durar un mes. Lo que se vende es muy costoso y la eficacia no es tan buena, porque lo que se ofrece en la farmacia es un producto sintetizado, no es natural como nosotros lo preparamos, y hay una gran diferencia. Seguiremos cultivando y preparando nuestro aceite bajo riesgo de que nos puedan incautar o apresar, por eso exigimos seguridad para los pacientes que realmente necesitan la medicina”, apuntó.
Industria
La industria del cannabis en Paraguay es incipiente, agregó Cabezudo, y subrayó que existe una oportunidad extraordinaria de que Paraguay se posicione en el mundo del cannabis. “Tenemos que juntarnos y aprender a trabajar juntos, y encontrar con el Gobierno las posibilidades de nuevas normas y licencias que dinamicen el proceso, para que podamos hacer de esta planta tan discriminada un gran potencial de desarrollo para el país, antes de que el narcotráfico nos gane”, apuntó.