Sospechosa movida en caso V. Bogado
CORTE LE AUTORIZA A AUSENTARSE A PESAR DE QUE CAUSA ESTÁ A PUNTO DE EXTINGUIRSE
Un sugestivo permiso de una semana pidió la camarista Mirtha González a la Corte y de esa manera dilata que la Cámara de Apelación se expida sobre condena al exsenador Víctor Bogado.
González presentó un pedido de permiso y la Corte le dio curso favorable, por lo que la magistrada no asistirá a su despacho desde el 23 al 27 de setiembre, es decir, toda la semana próxima. El hecho favorece al exsenador Víctor Bogado (ANR, cartista) y a su “niñera de oro” Gabriela Quintana, quienes están maniobrando con chicanas para que el cobro indebido de honorarios por el que ambos fueron condenados a un año de cárcel se extinga.
La camarista presentó igualmente un certificado médico para justificar su ausencia de ayer y hoy.
Es llamativo que la Corte le haya concedido el permiso, atendiendo que la misma, junto a sus colegas Pedro Mayor Martínez y Cristóbal Sánchez, tiene que confirmar o no la condena a Bogado y a su “niñera de oro”.
El delito prescribirá el próximo 24 de octubre y es por esa razón que Bogado y Quintana vienen planteando reiterados incidentes para evitar que la Cámara de Apelación conformada por Pedro Mayor Martínez, Cristóbal Sánchez y Mirtha González confirme o no la sentencia de primera instancia.
El 20 de agosto pasado,
cuando ya estaba el fallo para ser emitido y solo faltaba la firma de la camarista Mirtha González, la misma no asistió a su despacho y ese día Víctor Bogado presentó una recusación contra Mayor Martínez y González.
Desde esa fecha que se vienen presentando recusaciones de parte de Bogado y su “niñera” que ayer la Sala Penal de la Corte las rechazó totalmente. Cuando el camino quedó despejado para que la Cámara de Apelación pueda emitir su fallo, se presenta la Dra. Mirtha González a pedir permiso.
De esta manera es la segunda vez que la camarista “ayuda” a los condenados a ganar tiempo y acercarse más al día en que se extinguirá el caso y el hecho que cometieron Bogado y Quintana quedará impune.
Las ausencias y permisos de la camarista son muy sospechosos, ya que se dan en los momentos clave en que se debe confirmar o no una sentencia.
Desde que se inició este proceso contra el exsenador encontró jueces benévolos que se prestaron a sus chicanas y dilaciones y no se atrevieron a sancionarlo por ser un litigante de mala fe.