Macri: A algunos les cuesta salir adelante Claman respeto al ambiente y defensa de las libertades
BUENOS AIRES (EFE). El presidente argentino, Mauricio Macri, dijo ayer que es consciente de que hay compatriotas a quienes “les sigue costando” salir adelante económicamente y lo notan en sus “bolsillos” o en su “mesa de todos los días”, y afirmó que su intención es no dejar a nadie atrás.
“Como presidente, mi tarea es que nadie, nadie, que ningún argentino quede atrás. Quiero ser el que, en una procesión, vaya detrás de todos, cuidando que nadie quede en el camino”, expresó Macri en Mar del Plata, donde recorrió las obras de ampliación del aeropuerto Astor Piazzolla de la ciudad, uno de los mayores centros turísticos de Argentina.
Macri parte con desventaja de cara a las elecciones del 27 de octubre después de que su rival, el opositor peronista Alberto Fernández, le sacara 16 puntos en los comicios primarios del 11 de agosto.
Desde el día después de las primarias, la crisis económica que vive el país suramericano desde abril de 2018 se recrudeció, el dólar trepó, la Bolsa se derrumbó y el efecto ya se notó en el dato de la inflación de agosto, que fue del 4 % respecto al mes anterior, y que acumula un 54,5 % interanual, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos.
Para paliar la situación, Macri tomó medidas como el control de los precios de alimentos de la canasta básica y supresión del IVA de otros productos, entre otras.
En la semana que terminó ayer, después de una campaña liderada por movimientos sociales y presentada por la oposición, el Senado aprobó de manera definitiva y por unanimidad la ley de emergencia alimentaria.
La iniciativa aprobada establece extender hasta finales de 2022 la ley de emergencia alimentaria dispuesta por decreto en 2002, tras la grave crisis del 2001, y cuya última prórroga caducaba en diciembre próximo.
La norma impulsa la creación del Programa de Alimentación y Nutrición Nacional y establece un incremento de emergencia de al menos el 50 % en las partidas presupuestarias de este año destinadas a políticas públicas nacionales de alimentación y nutrición. La XVII Cumbre Mundial de los Premios Nobel de la Paz concluyó ayer en la ciudad mexicana de Mérida con un llamado a vigilar la convivencia humana en un marco de respeto y asumir un compromiso que evite un mayor deterioro del planeta.
MÉRIDA, México (EFE). En el acto final, el gobernador del suroriental estado de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, resaltó el éxito del encuentro, así como las experiencias que el evento dejó en esta tierra.
Vila Dosal dijo ante unas 3.000 personas que estuvieron en el Centro Internacional de Congresos que “todos podemos hacer la diferencia y aportar nuestro granito de arena por la paz mundial”.
“Podemos hacerlo con pequeñas acciones individuales, empezando por la casa, amigos, el barrio y la ciudad, que se multipliquen todas ellas, mandando un mensaje poderoso, no solo a nuestros hermanos, sino al mundo”, agregó.
A su vez, en nombre de los jóvenes del mundo, un colectivo de ese sector se pronunció, a través de diversos representantes, por defender todas las libertades, entre ellas la de expresión. Eso, expresaron, ayudará a garantizar la paz y los derechos de las minorías, pues los medios son la compuerta que impulsa el compromiso social, aunque hay que decir que es imposible avanzar con información falsa.
Asimismo, se pronunciaron por continuar los esfuerzos en favor del desarme nuclear y evitar la amenaza que ello representa. De manera especial, los jóvenes de esta cumbre resaltaron el papel de la educación como la herramienta más potente para generar la paz.
Por su lado, al dirigirse a la concurrencia con la declaratoria final, denominada la Declaración de Mérida, la Nobel de la Paz 2011, la liberiana Leymah Gbowee, se pronunció en favor de lograr un entendimiento renovado del concepto de la paz. “Después de la devastación de dos guerras mundiales, una serie de guerras ideológicas, religiosas y civiles, la ausencia relativa de la guerra se ha confundido como si fuera un logro de paz”, expuso.
Señaló que mientras las libertades básicas “sean flageladas y exista la flagrante corrupción, la violencia, la desigualdad, la discriminación, no puede existir esta paz verdadera y por lo tanto no podemos alcanzarla”.
“Creemos que la verdadera paz no puede separarse del logro de la verdadera justicia, y estamos preocupados profundamente por las amenazas existentes al bien común”, añadió.
La liberiana pidió también a cada ser humano “entender cómo estamos conectados, no solo unos con otros sino con toda la vida”, y resaltó que “cualquier amenaza al bienestar de nosotros o del medioambiente nos afecta a todos”.
“En este momento pedimos a cada persona dejar su huella de paz por el mundo que todos compartimos y hacemos un llamado a los ciudadanos a contribuir en la construcción de un mundo más justo, más pacífico y más sostenible”, puntualizó.
En el acto participó el cantante puertorriqueño Ricky Martin.