“Máquinas bobas” son avanzadas, afirmó Streber
Las máquinas de votos tienen una tecnología avanzada según el funcionario del TSJE Fausto von Streber, quien demeritó el mote de “máquinas bobas”. Sin embargo, en países donde se utilizaron hubo denuncias de fraude.
La diferencia entre las máquinas de voto y las urnas electrónicas es que las primeras no tienen disco duro, no almacenan el padrón electoral, no guardan el voto depositado, emiten un papel con la impresión de los votos y un código QR, el cual el elector deposita en los sobres; la máquina tampoco estará conectada a una red ni a internet, y funcionará con una batería de 12 horas de autonomía en caso de cortes de electricidad. Respecto a los papeles impresos, se realizarán con tinta resistente al calor, indicaron.
Estas descripciones fueron manifestadas por Fausto Von Streber director de informática del Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE), quien además se mostró en desacuerdo con llamar a dichos artefactos “máquinas bobas”, como lo hizo el asesor Luis Mauro.
“El término que se usó no es tan adecuado. (Luis) Mauro dijo eso, pero en un contexto que es una máquina que no guarda los votos dentro de sí. Tiene mucha tecnología, tiene una pantalla de 17 pulgadas, touch screen (táctil). A través de la máquina se imprime la decisión del lector y con esa impresión se hacen el control y escrutinio”, dijo ayer Von Streber a ABC FM 98.5.
Cuestionamientos
Los funcionarios del TSJE indicaron que recibieron la propuesta de cinco empresas que son Smartmatic de Venezuela, Grupo Magic Software Argentina (MSA), Miru Systems de procedencia coreana, INDRA de origen español y Dominion Voting, canadiense.
Los países donde se utilizó el mismo sistema fueron Congo, Argentina y Ecuador, dijeron.
Según la ong Tedic en Congo se detectaron irregularidades con el voto electrónico cuando una encuesta de “boca de urna” que realizó la Conferencia Episcopal Nacional del Congo (Cenco) con unos 40.000 observadores en todo el país, daba como ganador a uno de los candidatos mientras que el resultado final por máquina de voto fue diametralmente opuesto.
En Argentina, tras la elec- ción de Mauricio Macri (2015) surgieron las dudas sobre el voto electrónico, que actualmente tiene divi
didos a los políticos. La empresa Magic Software Argentina (MSA) estuvo en la mira a raíz de los cuestionamientos.