Bogado sigue a la pesca de impunidad
CON SEIS AÑOS DE CHICANAS BUSCAN EXTINCIÓN DE SUS DELITOS
El exsenador Víctor Bogado (ANR, cartista) y su “niñera de oro” Gabriela Quintana están en busca de su impunidad total y para ellos pretenden llegar al 24 de octubre próximo sin que quede firme la condenada y pedir la prescripción de sus delitos, pero la Cámara tiene una opinión diferente.
Los camaristas Pedro Mayor Martínez, Cristóbal Sánchez y Mirtha González, el martes pasado confirmaron el fallo de primera instancia que condenó a Víctor Bogado y a Gabriela Quintana por el hecho de cobro indebido de honorarios a un año y a un año y seis meses de cárcel con suspensión de la ejecución penal, respectivamente.
Pero aparte de la confirmación de la condena también los camaristas rechazaron el pedido de prescripción y extinción de la acción penal planteada por ambos condenados.
“Se advierte que la conducta procesal de los condenados ha sido obstruccionista, en cuanto a la progresividad de la presente causa, coordinando incidentes de manera a evitar la continuidad de la persecución penal a través de las etapas pertinentes, situación esta que pese a los esfuerzos por reencauzar el procedimiento, las circunstancias dadas por los incidentes sistemáticos, así como las recusaciones interpuestas, se han convertido en obstáculos insuperables...”, dice una parte de la resolución por la cual se rechazaron los incidentes planteados por los dos condenados.
Luego los camaristas hacen un relato de las dilaciones que fueron planteando los hoy condenados para ir frenando la prosecución del proceso y hablan de los plazos “muertos”.
Estos días, que luego se convirtieron en años a decir de los camaristas se tiene que tomar en cuenta para ver que la acción está lejos de quedar prescripta, ya que se puede tomar que mientras se resolvían las chicanas no corrían los plazos.
Sin embargo, pese a todo esto las defensas insisten en que están a poco menos de un mes para que prescriban los delitos cometidos por sus defendidos.
Víctor Bogado y Gabriela Quintana, de manera casi impune se vienen burlando de la justicia al presentar incidentes tras incidentes y no someterse al proceso, con la intención de llegar a la extinción del proceso.
Jueces complacientes fueron los que nunca sancionaron a estos litigantes de mala fe y es por esa razón que ahora nos encontramos a las puertas de que el cobro indebido de honorarios por el que fueron condenados el exsenador cartista y su “niñera” quede impune, sin castigo, pese a que fueron condenados en dos instancias.