Posibles escenarios para solventar la crisis política que enfrenta Perú
La facción de congresistas opositores al presidente peruano Martín Vizcarra perdió capacidades para resistirse a la disolución del parlamento decretada por el Ejecutivo, poder que vio reforzada su posición con el apoyo y la tranquilidad con la que los ciudadanos han recibido ese movimiento.
LIMA (AFP). Los siguientes son los cuatro posibles escenarios en la crisis política peruana.
1. Comicios legislativos. Junto con disolver el Congreso, Vizcarra convocó a comicios legislativos para el 26 de enero para elegir a los 130 miembros del Congreso unicameral, lo que fue validado por el órgano electoral, que es autónomo.
Tendrán mandato hasta julio de 2021, pues deben completar el periodo de los elegidos en 2016.
Como la reelección fue eliminada en referéndum en 2018, los legisladores cesados no pueden postularse esta vez.
Este escenario es el más probable por ahora.
2. Mediación internacional. Los líderes opositores dijeron que enviarán representantes a países de la región para denunciar un “golpe” de Vizcarra, aunque fracasó su llamado a que la OEA interviniera en busca QUITO (AFP). de alguna mediación que les permita salvar su mandato en el Congreso.
Pero parece improbable que la crisis peruana se “internacionalice”, pues las instituciones del país siguen funcionando, incluido el Congreso (con su Comisión Permanente).
3. Tribunal Constitucional. Al rechazar intervenir en la crisis peruana, la OEA dijo que corresponde a su Tribunal Constitucional pronunciarse sobre la disolución del Congreso.
El jefe parlamentario Pedro Olaelchea dijo que la oposición evalúa llevar el caso al Tribunal Constitucional, aunque no confiaba en sus magistrados.
Fue precisamente el empeño del Congreso en nombrar nuevos magistrados del Tribunal mediante un cuestionado proceso lo que indujo a Vizcarra a disolverlo.
Si el Tribunal le diera la razón a la oposición, restituiría a los 130 legisladores y podría suspender a Vizcarra.
4. Renuncia de Vizcarra y nuevas elecciones. Seis días antes de ser disuelto, el Congreso rechazó la propuesta que Vizcarra lanzó el 28 de julio de recortar un año su mandato y el de los parlamentarios, adelantando las elecciones para abril de 2020 (en vez de abril de 2021).
Tras ser cesados, los parlamentarios opositores quieren que Vizcarra renuncie y que se convoque a elecciones
presidenciales adelantadas, además de legislativas.
Este escenario parece descartado, pues Vizcarra hizo esta propuesta debido a la imposibilidad de gobernar con un Congreso obstruccionista, del cual se deshizo al disolverlo.
Además, constitucionalmente Vizcarra solo puede renunciar ante el Congreso, que no existirá hasta después de los nuevos comicios. No puede dimitir ante la Comisión Permanente.