Sin fondos para enfermos graves
El Ministerio de Salud Pública no cuenta con fondos para cumplir leyes que se promulgan sin presupuesto que les respalde, como la Ley 6266/2018 de Atención Integral a las Personas con Cáncer y la Ley Nº 5809, que establece cobertura médica a personas con esclerosis múltiple.
Pese a la rápida reglamentación de la Ley 6266/2018 de atención a las personas con cáncer, esta aún no se puede cumplir por falta de presupuesto. Enfermos graves fallecen por falta de medicamentos para su quimioterapia, o de lo contrario familiares y organizaciones deben peregrinar para conseguir los medicamentos, cuyas compras se están realizando por la vía de la excepción, sin presupuesto que garantice la provisión para los siguientes meses.
Lo mismo pasa con la Ley Nº 5809, que establece cobertura médica en el Sistema Nacional de Salud a personas con esclerosis múltiple. Esta ley ya se promulgó en mayo de 2017, por el gobierno de Horacio Cartes, sin embargo, el exministro Antonio Barrios obvió reglamentar la ley y jamás de aplicó. Recién en este momento (tras un pedido de organizaciones civiles) se está trabajando en la reglamentación.
El Dr. Juan Carlos Portillo, titular de la Dirección General de Desarrollo de Servicios y Redes de Salud, explicó que la Ley 5809 no prevé una fuente de financiamiento adicional exclusiva para este tipo de enfermedades que se estima tiene un costo mensual de G. 10.000.000 por paciente.
“Esta situación obliga una reingeniería de los recursos ordinarios del Ministerio, tanto lo que tenga que ver con lo necesario, técnicamente, para el diagnóstico, la evaluación y seguimiento de estos pacientes, y fundamentalmente para la adquisición de los fármacos necesarios, que tienen altos costos como los medicamentos oncológicos”, apuntó.
Se calcula que existen más de 600 personas con esclerosis múltiple en Paraguay que, comparando con otras enfermedades que son más frecuentes, esta población de pacientes es baja. Sin embargo, el Dr. Portillo apuntó que si estos pacientes no reciben atención o tratamiento, la repercusión sobre el enfermo es grave e incapacitante.
“Si hacemos un balance o estudios de costos, probablemente va a resultar que, independientemente que el tratamiento sea oneroso, igual es beneficioso porque obviamente se le cura al enfermo y se le permite llevar una vida normal, que probablemente no va a poder llevar si deja que evolucione la enfermedad”, apuntó.
Con relación la reglamentación de esta ley indicó que en una semana más tendría que estar, pero que a partir de allí se debe iniciar el proceso de reprogramación presupuestaria, y llevar un mejor registro de los enfermos.