Brasileño fue de visita y quedó preso en San Pedro
Un brasileño de 34 años contra quien había orden de captura en su país fue detenido ayer en el penal de San Pedro, hasta donde fue con una identificación falsa para visitar al concejal de Caazapá Benjamín Adaro Monzón, quien está preso bajo el cargo de tener vínculos con el crimen organizado.
SAN PEDRO (Omar Acosta, corresponsal). El extranjero fue identificado como Paulo Cándido Oliveira da Silva (34 años), quien intentó ingresar a la penitenciaría de San Pedro con la presentación de un documento de identidad brasileño con el nombre de Alex de Oliveira da Silva.
Las autoridades del recinto penitenciario cotejaron sus huellas con una base de datos informatizada y constataron la verdadera identidad del hombre –Paulo Cándido Oliveira da Silva– sobre quien pesaba una orden de prisión domiciliaria en San Pablo, Brasil, por el
hecho punible de robo de vehículos.
El hombre se trasladó hasta el citado penal con la intención de visitar a Benjamín Adaro Monzón (ANR), concejal departamental de Caazapá, quien se encuentra preso en esa penitenciaría como procesado por los hechos punibles de asociación criminal y por la violación a la Ley de Armas, al ser sospechoso de ser parte de una organización del crimen organizado.
Posteriormente, Paulo Oliveira declaró ante las autoridades que fue enviado por una persona llamada Dalila Ferreira, de quien no se tienen mayores datos.
En el procedimiento de cateo se descubrió que Paulo Cándido Oliveira da Silva había intentado introducir a la cárcel lo que parece ser un manual de combate paramilitar al crimen organizado, que consta de 34 páginas.
También tenía una agenda, teléfonos, cargadores y una memoria portátil (pen drive), cuyo contenido se desconoce aún. Estos elementos no se pueden introducir a la cárcel.
El detenido fue llevado inmediatamente hasta la comisaría de Santa Rosa del Aguaray, donde quedó a disposición del Ministerio Público.
El director de Policía de San Pedro, comisario Francisco Gómez, adelantó que la intención es revocar la prisión domiciliaria de Oliveira da Silva y expulsarlo. Igualmente analizarán las evidencias halladas.