Ediles de San Lorenzo persisten en su idea de poner trabas para Muv y Uber
Los concejales de San Lorenzo se mantienen en imponer trabas a los conductores de Muv y Uber que operan en la ciudad y no accedieron al pedido del intendente de suspender temporalmente la polémica ordenanza.
SAN LORENZO (Antoni a Delvalle C., corresponsal). Lo único que la Junta Municipal accedió a dejar sin efecto por un mes, hasta que se revise la Ordenanza 232/19, que regula prestación de servicio a través de las citadas plataformas, es el artículo 5º de dicha normativa. Ese artículo prohibe alzar pasajeros a 100 metros a la redonda de una parada de taxi, por lo que tras su suspensión, los conductores de Muv y Uber podrán subir a sus clientes en cualquier parte.
Sin embargo, se mantiene la exigencia de que los conductores de estas plataformas cuenten con registro de conducir “A Profesional”, que utilizan los choferes de ómnibus del transporte público. Esto va a impedir a la mayoría de los jóvenes poder trabajar, ya que su registro es de categoría particular.
El martes último, el abogado representante de Muv, Marcelo Duarte, en la reunión con el intendente Alcibiades Quiñónez y algunos ediles, había explicado que se trata de un “servicio privado de interés público”,
porque el contrato se da entre el chofer y el pasajero, mientras que las plataformas son apenas intermediarias. Aún así, los concejales siguen asegurando que se trata de “transporte público”.
Antes de tomar la decisión de rechazar oficialmente la propuesta del intendente, los concejales recibieron ayer a los conductores de Muv y Uber y hasta los trataron de forma intransigente y hasta prepotente. Por ejemplo, el presidente de la Junta Municipal, Nelson Peralta, exigió prepotentemente que le expliquen por qué Uber y Muv no son transporte público y sí un servicio diferenciado, y se quejó de que por las redes sociales está siendo tratado hasta de burro. Aunque después dijo que eso no le importa.
Los conductores comentaron que en el caso de la Junta Municipal de Asunción, esta entendió y reconoció que se trata de un nuevo servicio diferenciado y por eso se aprobó una ordenanza que puso fin al conflicto con taxistas. Pero en la “ciudad universitaria” aprobaron una norma antiMuv/Uber. De acuerdo con lo informado, la polémica ordenanza podría ser revisada dentro de un mes por parte de la Junta Municipal de San Lorenzo, ya que representantes de Uber y Muv prevén presentar un anteproyecto de ordenanza que acabe con los cuestionamientos actuales.
Mientras tanto, persistirán las exigencias criticadas de la normativa, como por ejemplo, que los conductores estén “bien vestidos”.