Caos y críticas por controles en aeropuertos de EE.UU.
WASHINGTON (EFE). La obligación de someter a los pasajeros procedentes de Europa a controles para detectar el covid-19 ha creado el caos en los aeropuertos de Estados Unidos.
Según los relatos de los afectados, estos controles les obligan a permanecer junto a pasajeros de diferentes vuelos en espacios cerrados durante horas, sin que se sepa si hay personas enfermas entre ellos, lo que contradice además las recomendaciones de evitar las aglomeraciones para prevenir el contagio y propagación del nuevo coronavirus.
Desde la medianoche del viernes, en Estados Unidos se aplica una prohibición a la entrada de extranjeros procedentes de 26 países europeos, a los que a partir de hoy se suman Reino Unido e Irlanda, lo que ha provocado una avalancha de estadounidenses regresando al país antes de que las aerolíneas empiecen a cancelar vuelos procedentes de Europa debido a la escasez de demanda.
Testimonios de varios pasajeros que regresaban de Europa cuentan que tuvieron que hacer en la noche del sábado colas durante más de cinco horas para ser examinados en el Aeropuerto Internacional O’Hare de Chicago, antes de hacer otra cola para la aduana.
Según algunos medios, las esperas en el aeropuerto de Chicago, que es el de mayor tráfico aéreo del país, fueron tan largas, que el personal de la terminal estaba repartiendo agua y comida a la multitud.
Los pasajeros procedentes de Europa, Corea del Sur, Irán y China deben primero esperar en la fila para que se verifiquen sus pasaportes y para entregar un formulario de declaración y otros en los que se les hacen preguntas de carácter médico, para luego ser llevados a otra fila con el fin de someterse a una revisión médica y verificar que no tengan fiebre.
“Lo hacen al revés. Si alguien tuviera fiebre, nunca debía haber estado en la cola”, destacó uno de ellos.