Ministra se expone a proceso por prevaricato en caso DD.JJ.
La Corte Suprema de Justicia debe analizar una nueva recusación planteada contra Gladys Bareiro de Módica en el caso que estudia la publicidad de las Declaraciones Juradas de las más altas autoridades de la República.
En caso de no apartarse, la ministra podría incurrir en un caso de prevaricato, lo que podría ser incluso motivo para un juicio político, señalaron a ABC Color diversos magistrados.
La recusación fue planteada por la defensa de nuestro compañero de trabajo, el periodista Juan Carlos Lezcano, quien presentó una acción judicial contra la Contraloría General de la República por negarse a entregar información pública.
En el escrito de recusación, se señala que las declaraciones juradas presentadas por Bareiro de Módica forman parte de los pedidos de acceso a la información originales planteados por el periodista y que motivaron la acción judicial.
Lezcano solicitó al ente de control copias de las declaraciones juradas de las más altas autoridades de la República entre los años 1998 y 2017, incluidos los ministros de la Corte Suprema de Justicia.
Bareiro es la única de los ministros cuyas declaraciones juradas están afectadas y sigue en el caso. Los demás, como Antonio Fretes, Luis Benítez Riera y César Garay Zuccolillo, decidieron apartarse.
Interfirió en otro poder
Además, Bareiro fue la que solicitó que la Corte Suprema se entrometiera abiertamente en otro poder del Estado. En noviembre de 2018, el mismo día que el Senado estudiaba un proyecto de ley que establecía como obligatoria la publicidad de las declaraciones juradas, la Corte remitió a la Cámara Alta un dictamen en el que aseguraba que la legislación no debía ser aprobada.
El dictamen fue remitido por el entonces titular de la Corte Suprema, Raúl Torres Kirmser. En una abierta intromisión en las funciones de otro Poder del Estado, la Corte intentó así frenar la aprobación del proyecto que permitirá mayor transparencia.
Además de la abierta intromisión en las funciones de otro poder, los ministros de la máxima instancia judicial incurrieron en un inocultable prejuzgamiento. Luego de los cuestionamientos, Torres Kirmser señaló que el dictamen había sido enviado al Senado a pedido de Bareiro de Módica. Es decir, la misma ya preopinó.
La ministra de la Corte Suprema Gladys Bareiro de Módica podría incurrir en el delito de prevaricato si no se aparta del estudio de la inconstitucionalidad que planteó la Contraloría para no publicar Declaraciones Juradas. La alta magistrada es parte interesada y preopinó abiertamente en la causa.