Covid-19 vino a desnudar falencias del rubro cárnico
El covid-19 vino a desnudar las debilidades de organización en la ganadería, la falta de políticas claras en la comercialización y otros temas a mejorar, dijo el doctor Pedro Galli, directivo de la Asociación Rural del Paraguay (ARP).
El conflicto entre ganaderos y frigoríficos se acentuó en los últimos tiempos debido al bajo precio que están recibiendo los productores por kilo de animal vivo vendido (según ellos mismos), los empresarios de la carne aducen que esto se debe al cierre de mercados por culpa del covid-19.
Sobre ambos puntos, el doctor Pedro Galli fue claro al señalar que “acá quedamos como si fuera que nos estamos tirando una pelota tatá (pelota de fuego), que corre de una mano a otra, y no se están viendo soluciones, pues creo que este es el momento de dejar de lado el recelo, la desconfianza y buscar un punto de convergencia, ser más amplios de espíritu y de mente, además de tolerantes, y dejar de lado la picardía, nos creemos vivos porque aprovechamos una oportunidad, tenemos que pensar ya en lo que se viene”.
“Dicen los expertos que este tipo de crisis las tendremos de manera cíclica, si no es una nueva pandemia podría ser una crisis natural o económica a nivel global, para la cual deberíamos estar preparados. El campo necesita pensar en el día después de esta crisis sanitaria y estar preparado para las próximas que puedan llegar. Es imprescindible generar acuerdos entre los productores, la industria y las cadenas de supermercados”, manifestó Galli.
Sin inversión y endeudado
Los datos que manejan en el sector señalan que antes del covid-19, las deudas del rubro ganadero llegaban a los US$ 1.600 millones de dolares. Hoy esta deuda definitivamente ha aumentado. Además, los productores ya están refinanciando y tomando nuevas cuentas; si estaba difícil el año pasado, este año pinta ser más complicado, no hemos sentido que se hayan fijado políticas crediticias acordes a la situación de emergencia, sino contrario, explicó.
“Este momento creo que los productores vamos a entrar en un estado de hibernación, nadie se va a atrever a hacer inversiones, tenemos que sentirnos afortunados si es que podemos mantener nuestros campos, pero por otro lado, debemos buscar ser creativos para seguir adelante con nuestro trabajo”, finalizó el doctor Galli. todo lo
VILLETA (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). El nivel del río Paraguay sigue bajando y si bien aún no afecta en gran medida a la economía local, debido a que siguen llegando las embarcaciones, ya está generando gran preocupación de las autoridades de esta ciudad.
Los buques que llegan hasta esta ciudad ya lo hacen con carga muy reducida y genera sobrecostos a las navieras, que buscan la forma de arribar a las terminales portuarias sin mayores demoras, pero deben hacer prácticamente dos viajes para transportar lo que anteriormente lo hacían en uno.
“Hasta esta localidad se llega sin mayores complicaciones. Y confiamos que no afectará aún en gran medida a la economía de la ciudad, los puertos siguen operando y las embarcaciones llegan, aunque con carga ya reducida, pero no sabemos que pasará en el futuro si sigue bajando el nivel del río”, expresó el intendente, Teodosio Gómez (PLRA).
Afecta a pescadores
El jefe comunal agregó que la bajante no solo afecta a la navegación, sino también a los pescadores que ya sienten el impacto de este fenómeno, porque la actividad pesquera se redujo en un buen porcentaje, debido a la escasez de peces.
“Muchos de los pescadores viajan agua abajo, hacia el Ñeembucú para probar suerte, pero también implica mayor gasto para ellos. Hacia las localidades de San Antonio y Villa Elisa la navegación se está tornando aún más complicada, pero siguen llegando a los puertos.
Las terminales portuarias esperan que la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP) realice dragados en los puntos críticos.