Aún deben entregar 90% de insumos
Pese a que el Ministerio de Salud inició la rescisión de los contratos con Imedic y Eurotec, debido a que los trajes de bioseguridad y las camas que trajeron no reunían las condiciones técnicas especificadas en los acuerdos, ambas firmas pretenden rever la situación y se preparan para entregar el 90% de los artículos que aún no llegaron al país.
Por un lado, el empresario Justo Ferreira y sus abogados, alegando que el incumplimiento de los acuerdos fue por fuerza mayor –ya que sus proveedores en China enviaron otros artículos y no los que pidieron– plantearon al Ministerio de Salud la entrega de 50 camas de terapia intensiva para compensar las que habían entregado en principio, que eran de menor calidad a las exigidas por el Estado.
Así también, las firmas pretenden reemplazar los trajes de bioseguridad. En este caso, los artículos debieron ser confeccionados de una sola pieza, pero los traídos tienen costuras, lo que podría permitir el paso del virus del covid-19 a través de las aperturas.
Por otro lado, las empresas prevén entregar todas las mercaderías previstas en los contratos, que hasta tanto no se resuelva la rescisión, siguen vigentes. Justo Ferreira explicó que para ello llegarán otros tres cargueros con el 90% de los productos restantes. Dos de ellos, que salieron de Hong Kong, China, y pasaron por Oakland, Estados Unidos, ayer se encontraban en Ezeiza, Argentina. Deberían arribar a nuestro país en las próximas horas. Mascarillas, trajes de protección personal, protectores oculares y protectores faciales son esperados.
El citado accionista de Imedic y Eurotec señaló que, atendiendo a que sus proveedores de China no les enviaron los productos prometidos en la oportunidad anterior, no hay modo de saber si los que lleguen ahora tendrán o no la calidad requerida. “Solamente cuando lleguen sabremos”, manifestó, pero aseguró que las empresas asumirán responsabilidad en el hecho y que entregarán al Estado los artículos de uso médico tal cual se comprometieron.
Respecto a que dos empresas del grupo familiar se hayan presentado en la misma licitación, Justo Ferreira afirmó que se trata de una práctica común que también la implementan otros grupos empresariales.
Explicó que trabajó con la familia Harrison en empresas farmacéuticas hasta que se jubiló, aunque siguió teniendo vínculos laborales con ellos hasta el 2018. Contó que en 2010 él montó su empresa con ayuda del escribano Óscar Harrison.
Sobre sus socios comerciales Roque Dagogliano y Carlos Borrell indicó que ambos eran gerentes del grupo Scavone hasta que también se jubilaron. Los dos están procesados por estafa y lesión de confianza.
Imedic y Eurotec se adjudicaron unos US$ 204 millones en contratos con el Estado entre el gobierno de Horacio Cartes y el actual. Ferreira y sus abogados dijeron que las denuncias actuales son parte de una batalla por sacar a sus firmas de competencia, emprendida por históricas empresas proveedoras de medicamentos al Estado paraguayo.
Por otro lado, Justo Ferreira y sus asesores legales negaron tener vinculación con la clonación de números de teléfonos celulares de dos periodistas y un diputado, quienes investigaban vínculos de Eurotec e Imedic con el Estado. La Policía y la Fiscalía investigan ese caso, en el que ya hay tres imputados.