Pocos, pero extraños casos en niños
NUEVA YORK (EFE, AFP). Un estudio publicado en la revista estadounidense JAMA Pediatrics reveló nuevos detalles sobre las complicaciones respiratorias que pueden sufrir algunos niños pacientes de covid-19 ingresados en las unidades de cuidados intensivos a lo largo de Estados Unidos durante la pandemia.
El estudio, del que se ha hecho eco el diario The New York Times, refuerza la evidencia de que solo un pequeño porcentaje de niños se ve gravemente afectado por el virus, aunque confirma que algunos pueden enfermarse “de forma devastadora”, especialmente si cuentan con enfermedades previas.
De hecho, la gran mayoría de los pacientes, unos 40, incluidos los que murieron, tenían afecciones médicas preexistentes y casi la mitad de esos pacientes contaban con trastornos complejos del desarrollo, como parálisis cerebral o se les había practicado tratamientos como traqueotomías o sondas de alimentación, así como cáncer o sistemas inmunodeprimidos por trasplantes de órganos o afecciones inmunológicas.
La investigación, sin embargo, no ha abordado el misterioso síndrome vinculado al coronavirus del que han alertado las autoridades sanitarias en Nueva York, donde se han registrado al menos 73 casos de niños que han sufrido problemas inflamatorios y cardíacos potencialmente mortales.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, manifestó el domingo su “seria preocupación” por el aumento de un síndrome que afecta a los niños que los científicos creen que está relacionado con el nuevo coronavirus.
Se han detectado 38 casos de inflamación pediátrica en Nueva York, la ciudad estadounidense más afectada por la enfermedad de covid-19, y otros nueve casos aún están en estudio.
En el estado de Nueva
York se registraron tres muertes relacionadas con este síndrome.
“Lo que hace, básicamente, es que provoca una respuesta muy intensa y casi abrumadora del sistema inmunitario del niño. Y lastima su cuerpo”, dijo De Blasio.
A pesar de la aparición de estos casos, el covid-19 pocas veces se desarrollaba en formas graves en niños.