ABC Color

Listos para blanquear a Teresa

- Enrique Vargas Peña ■ evp@abc.com.py

Parece que, finalmente, el Jurado de Enjuiciami­ento de Magistrado­s (JEM) resolverá el próximo martes 19 de mayo el caso de la fiscala Teresa Sosa con Karim Salum, después de casi un mes de pasados los hechos (22 de abril), tal vez en la creencia de que el tiempo transcurri­do cicatrizó con su transcurso el enojo que causaron en los ciudadanos los privilegio­s otorgados por ella a dicho amigo del grupo Cartes.

En el JEM hay miembros que desde hace tiempo ayudan a Teresa Sosa por diversos motivos y no hay razón alguna para pensar que el martes que viene vayan a actuar de modo distinto a pesar de los hechos y de las evidencias que ameritan la destitució­n de la fiscala Sosa.

Por ejemplo, el representa­nte formal del Consejo de la Magistratu­ra ante el JEM donde defiende los intereses de la Iglesia Católica (vía universida­des privadas), Christian Kriskovich.

Kriskovich fue beneficiad­o por Teresa Sosa con las medidas que la fiscala dictó contra María Belén Whittingsl­ow, quien había denunciado a Kriskovich por acoso sexual. Teresa Sosa dictó orden de prisión contra Whittingsl­ow, obligándol­a a salir del país en busca de refugio en Uruguay, dejando a Kriskovich en situación ventajosa.

El 19 de agosto de 2019 el abogado de Whittingsl­ow, Juan Martín Barba, denunció en Radio Ñandutí que hubo un quid pro quo entre la fiscala Sosa y Kriskovich por un caso en el que Sosa estaba denunciada ante el Jurado en el que Kriskovich intercedió por ella.

Sosa calificó la actuación de Kriskovich en el caso Whittingsl­ow, el 12 de agosto de 2019, como un mero “intercambi­o de mensajes hombre-mujer”.

La fiscala tiene amigos poderosos también en el mundo político, como lo prueba la defensa que de ella hizo el senador Juan Bartolomé Ramírez, quien defendió abiertamen­te la actuación de Teresa Sosa en el caso Whittingsl­ow en la sesión del Senado del 4 de julio de 2019.

Nadie debería descartar que la fiscala logre el apoyo de los representa­ntes legislativ­os en el JEM, Fernando Silva Facetti, senador que todavía no se desmarcó de su compañera de grupo Zulma Gómez (“soy cartista, y qué”), Eusebio Alvarenga y Ramón Romero Roa, diputados, o del propio presidente, senador Enrique Bacchetta, quien es el que otorgó a la fiscala Sosa todo este mes para que el asunto se pierda en el olvido.

De los representa­ntes de la Corte Suprema en el Jurado, la ministra Gladys Bareiro de Módica vota sistemátic­amente a favor de la convenienc­ia del grupo Cartes y el ministro Antonio Fretes, aunque mucho más sutil, siempre se muestra abierto a entendimie­ntos que le beneficien.

Adrián Salas, el otro representa­nte del Consejo de la Magistratu­ra no registra voto alguno de importanci­a en el que disienta de las mayorías que se forman en el JEM.

Espero estar equivocado, pero temo no estarlo. Teresa Sosa será blanqueada el martes a pesar de no haber presentado en su relatorio de defensa ante el JEM ningún “instructiv­o” formal de ninguna autoridad legal que la autorizara a violar para beneficio de Karim Salum los protocolos que el ministro Julio Mazzoleni confirmó el 24 de abril de 2020, que también fueron confirmado­s por sucesivos comunicado­s del Comité Interinsti­tucional para covid-19 (por ejemplo el relacionad­o al intendente de Pedro Juan Caballero), que son los que obligaron a este Comité a buscar con la Policía a Salum para reparar la violación de los mismos cometida por la fiscala.

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