Brasil rumbo a la tormenta perfecta: covid-19, gripe, dengue y sarampión
Brasil camina hacia una tormenta perfecta con la curva del covid-19 al alza, el inicio de la temporada de influenza, el final de la etapa de dengue y brotes activos de sarampión.
SÃO PAULO (EFE). Mientras se llenan las unidades de cuidados intensivos de los hospitales, el presidente Jair Bolsonaro sigue enfrascado en una “guerra política” contra las medidas de aislamiento de los Gobiernos regionales y a favor de la vuelta a la normalidad.
En esa cruzada ya han caído dos ministros de Salud en menos de un mes: Luiz Henrique Mandetta, defensor acérrimo de las cuarentenas, y Nelson Teich, que se negó a recomendar la cloroquina para todo tipo de pacientes con coronavirus, como desea el líder ultraderechista.
Los dos eran médicos y ahora, con la curva en plena escalada exponencial, la cartera de Salud está en manos, de forma interina, de Eduardo Pazuello, un general del Ejército sin experiencia en el área.
Hasta el sábado, Brasil registraba 233.142 casos confirmados, superando ya a Italia y España, y 15.633 muertos.
Varios gobernadores y alcaldes relatan altos índices de ocupación de las unidades de cuidados intensivos, que amenazan con el colapso del sistema de salud público.
El pico está previsto que se alcance en las próximas semanas, aunque el covid-19 no será la única emergencia sanitaria a la que tendrá que hacer frente el país.
Combinación explosiva
La expansión del coronavirus, que llegó a Brasil en febrero, se produce en medio de otros brotes infecciosos que ya venían preocupando a las autoridades sanitarias.
El país ahora está superando el pico de dengue, transmitida por el mosquito Aedes aegypti, que también es portador del virus del Zika, la fiebre amarilla y el chikunguña, que suele ser en abril y mayo.
En lo que va del año se notificaron 676.928 casos probables de dengue, con 265 óbitos.
A partir de junio, con la llegada del invierno austral, los casos de dengue bajan, pero suben los de gripe común y otras enfermedades respiratorias. En 2019 registró 1.122 muertes por los tres tipos de influenza.
Este año a la influenza y el dengue se suma el covid-19 y con ello la dificultad de diferenciar cada caso, pues los tres virus provocan síntomas similares en los primeros días de la enfermedad.
A todo esto hay que añadirle también brotes de sarampión que continúan activos en las cinco regiones de Brasil: norte, nordeste, centro-oeste, sudeste y sur.
En lo que va del año se han reportado 2.910 casos de sarampión, casi la mitad de ellos en el estado de Pará, también uno de los más afectados por el coronavirus y tres fallecidos. En 2019 hubo 18.200 casos de sarampión y 15 muertes, 14 de las cuales en São Paulo, hoy el epicentro del covid-19.