Pandemia afectó la reforma tributaria y presupuesto por resultado, afirman
Además de todo el impacto socioeconómico que se ha generado con la pandemia del covid-19, esta también afectó la reforma tributaria que rige desde este año y el presupuesto por resultado previsto para este ejercicio, según afirmó ayer el ministro de Hacienda, Benigno López.
“Tiene un impacto importante no solo en lo que hace a la reforma tributaria en sí, que seguramente algunos programas se van a ir demorando en su aplicación y en su efectividad; también impacta en el ministerio desde el punto de vista presupuestario público. Estamos posponiendo el presupuesto por resultado, que es clave para mejorar la calidad del gasto, pero más adelante vamos a ir viendo los resultados de este gran esfuerzo que se hizo desde el Estado y la sociedad civil de acordar un sistema tributario más equitativo”, dijo ayer el ministro de Hacienda, quien acompañó al viceministro de Tributación, Óscar Orué, en el programa Conexión Tributaria, emitido los sábados en la 730 AM y ABC TV.
Con la reforma tributaria, el Gobierno proyectó mejorar la recaudación en 1% del PIB, unos US$ 400 millones más, en tanto que con el presupuesto por resultado preveía ahorrar otro 1% del PIB. Es decir, en total se estimaba contar con US$ 800 millones más, con la promesa de que la ley blinda esos recursos para que solo puedan ser destinados a salud, educación, infraestructura y seguridad.
No obstante, según López, más adelante, una vez que la ley de reforma tributaria esté totalmente desplegada, se verán los resultados de “un pacto social a través de un sistema impositivo con mayor equidad, de manera a que haya mayor contribución de los sectores que más tienen y un combate más eficiente hacia la informalidad, consiguiendo que gente que no está incorporada al régimen tributario, se incorpore”.
En tal sentido, el viceministro Orué hizo referencia al proceso hacia la transformación del sistema tributario, que será más justo en la medida en que se base principalmente en impuestos directos (sobre la renta) en lugar de indirectos (impuesto al consumo, IVA).
“Cuando llega esta administración tributaria, de todo lo recaudado 60% era IVA. De US$ 2.500 millones al año en recaudación, 60% de eso en 2017-2018 era IVA. Hoy es 50%. Se dio más recaudación en impuesto indirecto”, añadió.
Según dijo, con la reforma tributaria se consigue que “ese sector de socios y accionistas de una empresa paguen un poco más, que sectores agrícola y pecuario paguen un poco más y el rubro agroexportador pague mucho más, sin aumentar tasas, con una readecuación de la estructura tributaria, porque las reglas cambiaron para ellos. Y que aquellos que aportaban y que mantenían la recaudación les sea más sencillo pagar sus impuestos a través del resimple”.