En nombre del pobre
Una práctica frecuente de algunos políticos en nuestro país es aprovechar cualquier circunstancia para sacar ventajas, sean económicas o políticas, en nombre del bien común.
Desde el famoso discurso de la “lucha contra la pobreza” hasta el del no menos trillado argumento de mejorar la educación, la salud, y cuantos buenos deseos se pueda uno imaginar, han sido utilizados como caballitos de batalla para conquistar el poder o distraer recursos públicos.
En nuestro país, el fin de la política, que es servir al bien común, ha sido tan groseramente bastardeado al punto que se naturalizó el concepto de que la política es una oportunidad para “servirse” del pueblo.
En las últimas tres décadas cientos de “planes productivos“, “proyectos pilotos” y “programas” de salud fueron “craneados” en nombre del pobre, pero la pobreza sigue tan instalada como siempre. Peor aún, su presencia es cada vez más vigorosa y extendida.
La reflexión viene a cuento de una denuncia hecha por el titular de un comité de productores del distrito de San Pedro del Paraná, Carlos Mendoza, sobre el presunto incumplimiento de un componente de un proyecto de apoyo a pequeños agricultores de su comunidad. La iniciativa financiada por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) fue ejecutada por la Gobernación de Itapúa, en el marco de un programa denominado “Ñemity 4.0”.
Hay un entrecruce de versiones entre la del campesino y el responsable técnico del proyecto, ingeniero Eduardo Rebruk, sobre una provisión de sembradoras manuales que, según la matriz lógica del plan, fue aprobado con un monto de G. 120 millones.
Por lo general este tipo de denuncias son escasas, porque a menudo los afectados prefieren callar porque no tienen pruebas, o por temor a que la autoridad “se enoje” y excluya a la comunidad de futuros “planes”.
La duda instalada amerita una investigación de las autoridades competentes. Comenzado por la EBY, que es la que puso la plata, y los órganos de fiscalización del Estado, porque finalmente esa plata es del pueblo paraguayo y a todos interesa su destino.