Deberes ante la crisis
A la crisis de liderazgo en nuestro país se sumó la pandemia del covid-19 que está cargada de crisis social, económica, sanitaria y cultural. Ahora hay que reinventar nuestras vidas y convivencia para poder avanzar como sociedad, como nación; buscar nuevas formas de estudiar, trabajar, hacer negocios y emprender con creatividad para seguir adelante.
En todas las edades de la Historia: antigua, media, moderna y contemporánea, surgieron crisis de valores, económicos, políticos y sociales. También ante las crisis aparecieron nuevas ideas para enfrentar los enredos que han golpeado a la humanidad.
El covid-19 sorprendió a nuestro país y al mundo, demostrando que el hombre, a pesar de los poderes políticos y económicos, es tan frágil y endeble ante un virus mortal, como el coronavirus.
También ha demostrado que en el Paraguay operan estructuras que, amparadas bajo el poder político, dan manotazos para robar aprovechando compras de insumos médicos que, de acuerdo a las denuncias, no reúnen las condiciones exigidas para garantizar la protección del personal de blanco y para los pacientes.
Es una prueba de que la corrupción galopante corroe los tejidos de las instituciones del Estado. Son corresponsables de tamaña irregularidad el presidente de la República, Mario Abdo Benítez; el vicepresidente de la República, Hugo Velázquez; y el ministro de Salud, Julio Mazzoleni, así como el equipo de evaluación del Ministerio de Salud Pública.
La pandemia también dejó al descubierto que siguen en aumento la pobreza y extrema pobreza. En San Juan Bautista, capital del departamento de Misiones, así como en otras localidades del octavo departamento, hay miles de familias sin trabajo y que no tienen qué comer a consecuencia de la pandemia.
La falta de planes para el desarrollo económico y social sumergió a los habitantes en tan terrible situación de vulnerabilidad que sobreviven gracias a ollas populares.
En medio de la crisis social sobresalen la solidaridad y la creatividad para sobrevivir. Sin embargo es el Estado el que debe garantizar la vida y los demás derechos a la salud, educación, igualdad, protección a la familia, derechos económicos y sociales, etcétera de los ciudadanos. Para responder estos desafíos están los deberes políticos a fin de cumplir con las obligaciones ante el pueblo, Dios y la Patria.