Con su puesto paga educación de 3 hijos
Una hora antes del mediodía ya se puede percibir un atrayente olor en las calles Azara e Independencia Nacional. Es que don Ramón Gamarra ya encendió la plancha, colocó el aceite y en donde ya se están cocinando los panchos y chorizos. Sus clientes de siempre se acercan y don Ramón les ofrece unas butacas de madera que coloca contra la pared. Muchos lo conocen, considerando que está desde hace 30 años en el sitio. Lo que no saben es que cada vez que fueron a comprar un almuerzo ahí han contribuido con la educación de sus tres hijos, hoy universitarios. “Una ya se va a recibir este año de ingeniera comercial”, dijo, con orgullo de papá. Comentó que es oriundo de Yaguarón y que ahora vive en Ñemby, de donde todos los días toma el ómnibus para llegar a la capital del país.
“Antes no tenía trabajo, por eso vine acá. Aprendí desde cero”, rememoró sobre su decisión que fue tomada hace 30 años y que hoy lo hace ser un gran ejemplo para sus hijos. “Trabajando únicamente van a salir adelante, eso les enseñé”, expresó.
Recordó como una de las épocas más difíciles el periodo en que hubo una crisis económica en el país, en el año 1995. Lo vivido solo se parece a la actual crisis que ocurre debido a la pandemia del covid-19. Actualmente volvió a trabajar luego de un mes sin abrir su puesto, porque debe seguir costeando los gastos de su hogar y de sus hijos, expresó.