Hábiles para el engaño
La República, que deriva del latín respública, cuyo significado es la cosa pública, lo que se conoce modernamente como esfera pública; es una forma de Gobierno que garantiza la transparencia, en base a la rendición de cuentas de las autoridades. A pesar de más de dos milenios de vigencia, la mayoría de los políticos y en especial los congresistas no interpretan o no quieren entender cuan importante es la declaración de jurada de bienes. La declaración es una forma de garantizar a la población que no habrá enriquecimiento ilícito y que los bienes del Estado serán administrados por las autoridades de manera honesta, a la luz pública. Un grupo de diputados votó por despenalizar las declaraciones juradas falsas, ley que fue vetada por el presidente Mario Abdo Benítez. Luego, unos 18 diputados abdistas, cartistas y liberales llanistas firmaron una nota con el intento de interferir ante la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para no sacar el fallo a favor de la publicidad. Es evidente la búsqueda de ocultar bienes o dinero mal habido, apañar irregularidades, no solo en Diputados sino también en las instituciones públicas. El filósofo Aristóteles clasificó tres formas de Gobierno: la monarquía que es el Gobierno de uno solo; la aristocracia, Gobierno de los mejores; y la democracia, Gobierno del pueblo que a través del voto elige a sus representantes quienes deberán gobernar en base a las leyes. También el sabio griego sostiene que estos mismos gobiernos pueden caer en degeneraciones. En tiranía cuando el rey se convierte en déspota; en oligarquía cuando el poder cae en manos de inescrupulosos, y la demagogia cuando el pueblo es gobernado por demagogos, charlatanes, astutos y hábiles aprovechadores. En esta larga transición no se pudo consolidar la democracia porque la mayoría de los políticos que llegan al poder actúan según sus intereses personales y de grupos. Demuestran que son prebendarios, clientelistas y muy astutos para el engaño. Sin embargo, la forma de Gobierno es la democracia representativa, participativa y pluralista. No se puede confiar cuando las autoridades tratan de ocultar sus bienes ni rinden cuentas de sus acciones.