Tras escándalo de los audios, el PJ se prepara para juicio sin precedente
Hace un año, el exsenador Óscar González Daher interponía sus últimas chicanas para intentar descartar las pruebas ofrecidas por la Fiscalía, en el sonado caso de los audios difundidos por radio ABC Cardinal.
El juicio oral y público por el escándalo de los que dejaron al descubierto el desvergonzado manoseo a la Justicia será sin dudas, un desafío sin precedentes para el Poder Judicial.
En el mismo se desnudará toda la perversión del nefasto esquema instaurado desde el órgano contralor de jueces para torcer el destino de las causas, según los intereses particulares de algunos de sus miembros. Los acusados
El inicio está previsto para el 10 de setiembre y en la ocasión, el exsenador cartista Óscar González Daher, el exactuario del JEM Raúl
Fernández Lippmann y el abogado y exministro del Interior Carmelo Caballero serán juzgados por tráfico de influencias y asociación criminal, mientras que el exsenador Jorge Oviedo Matto (Unace) será juzgado por tráfico de influencias. El Tribunal de Sentencia
El Tribunal de Sentencia sorteado para realizar el mismo está presidido por Juan Carlos Zárate e integrado por Héctor Capurro, María Fernanda García de Zúñiga como miembros titulares y Olga Ruiz, como suplente.
Si bien la defensa del otrora todopoderoso presidente del Jurado de Enjuiciamiento
de Magistrados (JEM) interpuso todos los recursos posibles para tratar de excluir los audios del cúmulo de evidencias ofrecidas por la Fiscalía, sin éxito.
El escándalo de aprietes y negociados se inició cuando radio ABC Cardinal empezó a difundir audios de conversaciones del exsecretario del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, Raúl Fernández Lippmann, con jueces y fiscales.
Se trata de más de 200 grabaciones que exponen a la luz pública como nunca antes la podredumbre del “secreto a voces” del tráfico de influencia que marcaba el rumbo a seguir en los distintos procesos, así como también las consecuencias q ue podría acarrear ir contra el sistema, a los auxiliares de la justicia.
Como consecuencia del escándalo, González Daher fue defenestrado del Senado y Oviedo Matto se vio obligado a renunciar. El abogado Rubén Darío Silva también estuvo procesado en esta causa, pero fue sobreseído definitivamente.