Que intervenga monopolio de ANDE, piden a Conacom
Miembros del “Movimiento por la libertad y la república” presentaron un pedido a la Comisión Nacional de la Competencia (Conacom) para que intervenga en el caso de la “exclusividad o monopolio para el abastecimiento eléctrico” otorgado a la ANDE.
El miércoles último, Víctor Pavón Saldívar, Mario Centurión, Delio Dalla Fontana y Francisco Javier Villate presentaron, en representación del “Movimiento por la libertad y la república”, un pedido de intervención de la Conacom en su carácter de regulador en materia de defensa de la competencia, para que ejerza sus funciones delimitadas en la Ley 4956/13, en el caso de la exclusividad o monopolio para el abastecimiento eléctrico otorgado por la Ley 966/64 a la ANDE.
Recuerdan que el artículo 107 de la Constitución Nacional
prohíbe la creación de monopolios por ley y no hace excepción alguna a favor de algún particular o agente.
Es indiscutible la tremenda concentración y el poder de mercado de la ANDE originado por el otorgamiento de un monopolio, establecido mediante barreras de entradas artificiales a otros competidores interesados. La desfasada Ley 966/64, orgánica de la estatal, no admite competencia, lo cual, naturalmente, desemboca en un “abuso de posición dominante”, limitando a los consumidores nuestra capacidad de elegir, dicen.
Según la ley de la Conacom, la ANDE estaría incurriendo en al menos dos causales del capítulo relativo al “abuso de posición dominante”; el primer caso sería el de la “imposición, de forma directa o indirecta, de precios” en el que el Poder Ejecutivo es el que aprueba finalmente los pliegos tarifarios, pero es la ANDE la que influencia en forma directa y determinante en la estructura de precios de ese pliego tarifario, explican.
Agrega que así, la ANDE puede incluir todas sus pérdidas de electricidad en forma arbitraria y sin limitación legal alguna, traspasando a las facturas del consumidor, constituyendo esto una inapelable imposición.
También mencionan los privilegios o costos ocasionados por la exoneración del pago del 50% del monto de la electricidad consumida por sus empleados, también cargados a los precios de la tarifa entre otros privilegios laborales.