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La Dra. Ana Barrios, directora científica de la Sociedad Paraguaya de Oftalmología, manifiesta que ha aumentado considerablemente el número de consultas por problemas de visión, como el número de pacientes que necesitan usar corrección óptica ya sea de manera selectiva o permanente.
“Si hablamos de problemas como los vicios de refracción (miopía, hipermetropía y astigmatismo) en primer lugar se encuentra el factor genético, es mas probable que los desarrolles si tus padres o hermanos los tienen, y su aparición es más frecuente en la infancia y adolescencia. La miopía es uno de los defectos de refracción más comunes en la población joven. Se caracteriza por una mala visión de lejos, por lo que es el más fácil de detectar” manifiesta la doctora.
–Cuáles son las ventajas de usar anteojos?
–Según la profesional cuando está indicado el uso de anteojos en niños es fundamental que ellos escojan el color y diseño que más les guste, así es mas probable que los usen, porque fue elegido por ellos mismos y no por los padres, también deben ser livianos y flexibles para que se sientan cómodos a la hora de jugar o correr.
“Los filtros antirreflejo y UVX son importantes en todas las edades, para protegernos de la Luz del sol y la luz de la computadora”, dice.
Hoy en día por el aumento del uso de la tecnología, la luz azul que emiten las pantallas de los celulares y las computadoras, pueden alterar nuestro ritmo circadiano produciendo insomnio y fatiga visual, por lo que es de mucha ayuda utilizar cristales con filtro para la luz azul. Según Barrios la principal ventaja de usar anteojos es que la visión mejora y por ende, también la calidad de vida. Es además una protección para agentes externos como el viento, polvo, etc. Las desventajas podrían ser la incomodidad a la hora de hacer deportes y la estética, aunque en la actualidad, son un complemento de moda.
“La cuarentena para prevenir contagios por el covid-19 cambió nuestra forma de relacionarnos con el mundo. Tal es así que la mayoría de las personas trabajan, estudian o se entretienen a través de las pantallas, y los niños y adolescentes, pasan horas frente a ellas a causa de sus clases virtuales. Esta exposición excesiva genera problemas asociados, como el síndrome visual informático, que es un trastorno ocasionado por el sobreesfuerzo a que se someten los ojos tras el uso prolongado de las pantallas de las computadoras u otros dispositivos electrónicos como tablets y celulares”.
Síntomas
La doctora manifiesta que los síntomas incluyen dolores de cabeza, ojos rojos y picazón, fatiga visual, insomnio, e incluso en algunos casos cuadros de ansiedad. En estas situaciones, los ojos se ven obligados a realizar un mayor trabajo acomodativo para enfocar a tan corta distancia y además, el exceso de concentración reduce considerablemente la frecuencia del parpadeo, incrementando el riesgo de sequedad ocular. Junto a estos factores, hay otros muchos que contribuyen a la aparición del síndrome visual informático, como pueden ser:
*La iluminación de la habitación y, en especial, aquellos focos de luz que incidan directamente sobre la pantalla. *La luz azul de las pantallas de las computadoras y los celulares. *Las corrientes de aire o la excesiva sequedad ambiental (aire acondicionado o calefacción), que resecan los ojos. *Los posibles deslumbramientos y reflejos en el monitor, además de la propia postura corporal ante este. Asimismo, la altura de la silla y de la pantalla (la pantalla siempre tiene que ser más baja que nuestra mirada).
“Este exceso de trabajo de cerca hace que el ojo se acostumbre a enfocar a corta distancia, perdiendo así su capacidad de enfocar de lejos, produciendo una falsa miopía, lo que hace que la persona vea borroso de lejos luego de varias horas de trabajo en la computadora o uso del celular. Esta miopía puede luego establecerse si el factor predisponente se mantiene en el tiempo, así que es muy probable que luego de esta pandemia, aparezcan muchos casos de miopía en los pacientes que no tienen antecedentes familiares”, manifestó la profesional.
“Cabe resaltar que este síndrome no es reciente, existe ya hace varios años, pero aumentaron considerablemente las consultas oftalmológicas en estos últimos tiempos a causa de éste. Considerando que no es posible evitar el uso de dispositivos mientras dure la pandemia, se recomienda que las horas de clase o trabajo sean las únicas destinadas al uso de estos, y que sobretodo los niños y adolescentes, aprovechen sus horas libres para realizar actividades al aire libre. Es útil además una regla llamada 20/20/20, que recomienda que cada 20 minutos de uso de pantallas, miremos por 20 segundos a 20 pies que serían 6 metros, esto ayuda a relajar los ojos y evitar el exceso de fatiga visual y sobre todo el riesgo de aparición de la miopía. En niños en clases virtuales, si cada clase dura 30 a 40 minutos, en la pausa, enfocar de lejos por 1 o 2 minutos, y sobre todo evitar el uso de los celulares”, puntualizó Barrios.