Líbano e Israel inician histórica negociación sobre sus fronteras
NAQOURA, Líbano (AFP). Líbano e Israel, países vecinos oficialmente en guerra, mantuvieron ayer discusiones técnicas para delimitar su frontera marítima y levantar los obstáculos a la exploración de hidrocarburos, en una segunda ronda de negociaciones inéditas bajo los auspicios de Washington.
Tras varios años de esfuerzos diplomáticos estadounidenses entre bastidores, Líbano e Israel dieron a conocer a principios de octubre el lanzamiento de estas negociaciones históricas.
La mediación está garantizada ahora por un alto responsable estadounidense, John Desrocher.
El contencioso marítimo entre los dos países abarca una zona de 860 km2. Estas negociaciones son cruciales para Líbano, cuya economía está por los suelos y confía en la prospección marítima de hidrocarburos
Los libaneses presentaron ayer mapas y documentos que muestran los puntos en debate.
Para el gobierno israelí, el objetivo es “examinar la posibilidad de un acuerdo sobre la demarcación de la frontera marítima para permitir el desarrollo de los recursos naturales”, según un comunicado publicado el martes.
Es “la primera sesión técnica y debería lanzar las discusiones detalladas sobre la demarcación”, pronostica Laury Haytayan, experta en buena gobernanza de recursos de hidrocarburos en Oriente Medio.
Para Haytayan, Líbano piensa “reclamar lo máximo que pueda obtener”, y prevé ir incluso “más allá de los 860 kilómetros” cuadrados en discusión.
Esto incluiría el yacimiento de gas natural Karish, actualmente explotado por Israel. “Hay que esperar la reacción de los israelíes”, dice Haytayan.
Desde hace un año, Líbano conoce una recesión económica acompañada de una depreciación de la moneda nacional y un aumento de la pobreza.
El anuncio de las tratativas, que según algunos expertos podrían durar “meses”, provocó tensión en Líbano.
Los dos grupos radicales chiitas Hezbolá y Amal fustigaron la presencia de figuras civiles en la delegación libanesa y estimaron que solo los militares tenían que estar presentes.
La última gran confrontación entre Hezbolá e Israel se remonta a 2006. Una guerra que causó más de 1.200 muertos en el lado libanés y 160 en el israelí. Desde entonces, se han mantenido reuniones tripartitas organizadas con responsables militares por la Finul, la fuerza de la ONU desplegada en la zona para vigilar la frontera entre los dos países.
Ayer, en Naqura, tres hombres que se dijeron miembros de Hezbolá rompieron el material de un equipo de la cadena pública Télé-Liban y amenazaron a los periodistas presentes para que abandonaran la zona, afirmó uno de los reporteros.
El martes, el ministro israelí de Defensa, Benny Gantz, saludó las “voces positivas” que hablan en Líbano de la “paz con Israel”.
Estas negociaciones tienen lugar en medio de una gran iniciativa diplomática del gobierno estadounidense del presidente Donald Trump, quien ha conseguido que varios países árabes firmen la paz con Israel.