Suspenden por tercera vez cirugía de una niña
SAN LORENZO (Antonia Delvalle C., corresponsal). Elena Cuéllar, madre de una niña de 11 años de edad, con diagnóstico de malformación arteriovenosa en cuero cabelludo estadio IV, está desesperada porque en el Hospital Niños de Acosta Ñu por tercera vez consecutiva, en menos de un mes, suspendieron la cirugía a su hija. La menor puede fallecer por una hemorragia, atendiendo que en realidad espera someterse a una intervención desde mayo de este año.
Hace casi seis meses la pequeña oriunda de Caaguazú debía seguir su tratamiento quirúrgico en busca de sanación. Sin embargo, la madre que es pobre no disponía de unos G. 60 millones que cuestan los insumos que el hospital no tiene.
Luego de nuestra publicación, en octubre pasado, personas de buen corazón donaron los insumos necesarios.
La madre comentó que la cirugía fue programada para el 18 de octubre, pero no pudo realizarse porque su hija estaba anémica y le solicitaron seis donantes de sangre. Consiguió los donantes y se estableció una segunda fecha, pero surgió problemas en el angiógrafo, que es un equipo médico que permite realizar procedimientos.
La máquina estaba averiada. Ayer se presentaron por tercera ocasión para la cirugía y el aparato volvió a tener problemas, señaló.
El director del Hospital Niños de Acosta Ñu, doctor Pío Alfieri, señaló que los técnicos de la empresa tercerizada que tienen a su cargo el mantenimiento supuestamente repararon el equipo. Sin embargo, ayer cuando iban a utilizarlo nuevamente tuvo desperfectos.
Consultado para cuándo se reprogramaría la cirugía señaló que depende de que la máquina se repare y posteriormente tiene que armar un nuevo equipo quirúrgico que incluye anestesista, entre otros profesionales. No supo precisar la fecha, pero dijo lamentar la situación.
El neurointervencionista del Hospital Niños de Acosta Ñu, doctor David Cuevas, había informado en una nota anterior que el desarrollo cognitivo e intelectual de la paciente no es afectado por la patología que padece, pero el problema es que como son lesiones extensas, de alto flujo de volumen sanguíneo, compromete gravemente la vida de la niña.