INTERIOR Reverdece el Chaco luego de un año de dura sequía
Las lluvias registradas en las últimas tres semanas en el Chaco Central permiten que el campo recobre vida tras una larga sequía. Las precipitaciones fueron de diversa intensidad y posibilitaron la realización de cultivos.
FILADELFIA, Chaco (Marvin Duerksen, corresponsal).
En el Chaco Central hubo lluvias entre moderadas y mansas en tres ocasiones en las últimas semanas. Aunque las precipitaciones no ayudaron para acumular mucha agua en los tajamares, beneficiaron al suelo que absorbió rápidamente el vital liquido tras una prolongada sequía.
Las lluvias también permitieron la reactivación de labores en el campo.
Torsten Dürksen, de la Atención Técnica Fernheim (ATF), señaló que algunos socios de la cooperativa ya se animaron a cultivar sorgo y sésamo, aunque se constituye todavía un cierto riesgo
porque el suelo aún no absorbió suficiente agua, principalmente en aquellos lugares donde solo se registraron hasta ahora entre 30 a 40 milímetros. Otros cultivos, como maní y soja, se siembran de diciembre a enero, mientras el maíz en enero y febrero, esperando que caiga más agua.
La Gobernación Boquerón cada año ayuda conjuntamente con otras entidades a unas 140 aldeas indígenas en la preparación de chacras y entrega de semillas para cultivos de autoconsumo y renta. Ahora iniciará los trabajos la próxima semana, esperando un poco más lluvia, dijo Carlos Heinrichs, secretario de Pueblos Originarios.
En el sector ganadero, el pasto comienza lentamente a reverdecer en muchos piquetes, pero en otros quedó totalmente seco.
Los propietarios están trabajando la superficie, antes y después de las lluvias, con tractor y rastra de discos, para que tras la mayor lluvia puedan iniciar la sembra de pasto. Los piquetes necesitan más tiempo para recuperarse, y por eso en toda la zona sigue la compra de fardos de heno y caña dulce como alimento sustituto para los animales, pese a las lluvias.