Cartistas y llanistas protegen a la criticada fiscala general
Los diputados colorados y los llanistas mantienen supremacía por sobre los opositores en la Cámara Baja, lo que dificulta la posibilidad de que avance un nuevo pedido de juicio político a la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, quien ya había sido salvada por ambos sectores.
Con 43 diputados colorados entre oficialistas y cartistas, más los siete liberales llanistas, se dificulta la posibilidad de impulsar el juicio político a la fiscala general del Estado Sandra Quiñónez, quien nuevamente se encuentra en medio de las críticas, tras la orden de prisión dictada contra el presidente del mayor partido de oposición del Paraguay, el PLRA, Efraín Alegre.
Varios legisladores de la oposición coincidieron en que los referentes de dicho sector tienen la obligación de unirse ante la situación judicial presentada contra el titular liberal, y mostrar un gesto a la ciudadanía impulsando un juicio político para destituir a Quiñónez de la Fiscalía General, señalada por los mismos como instrumentada para favorecer a sectores de poder como el cartismo y afines al expresidente Horacio Cartes.
Sin embargo, para que la acusación prospere se requieren dos tercios de los votos de los diputados. Es decir, se necesitan 53 votos de los 80 para avanzar en un nuevo pedido.
El año pasado se rechazó un pedido de juicio político por mal desempeño de sus funciones contra Quiñónez, pero el mismo no prosperó. Varios diputados sostuvieron que no se puede presentar otro pedido en un plazo de un año. Sin embargo, si los motivos son diferentes, sí podría correr un nuevo proceso.
Primer intento fallido
En mayo del 2020 se llevó a cabo el primer intento de enjuiciar a la fiscala general del Estado Sandra Quiñónez por mal desempeño de sus funciones, cuando solicitó un trato preferencial para Karim Salum, hermano de Osvaldo Salum, gerente de empresas del expresidente Cartes.
El proyecto fue presentado el 25 de mayo y el 27, en sesión extraordinaria, se rechazó. En esa ocasión, la fiscala fue salvada con el voto de los 43 diputados colorados y también de 15 liberales.
Ellos fueron los llanistas Édgar Ortiz, María Nieves López, Enrique Mineur, Hugo Capurro, Sergio Rojas, Marcelo Salinas y Manuel Trinidad. Pero también sumaron sus votos de otras bancadas como Pastor Vera Bejarano, Roya Torres, Esmérita Sánchez, Arnaldo Rojas Feris, el acusado Carlos Portillo, Celso Maldonado, Rodrigo Blanco, hijo del destituido ministro de la Corte Sindulfo Blanco, y Roberto Acevedo.
Se abstuvo Emilio Pavón y estuvieron ausentes Eusebio Alvarenga, Carlos López y Fernando Oreggioni.