Bajo caudal del Paraná perjudica a pescadores
Dos grupos que ocupan las propiedades en Campos Morombí, conocidas como zona de Marina Cue, están frente a frente en el camino de acceso al lugar, en un ambiente hostil, donde se teme que ocurra un nuevo enfrentamiento. El Ministerio Público, sin embargo, no interviene en el conflicto.
CURUGUATY (Rosendo Duarte, corresponsal). En la tarde del pasado lunes, el sector de “sintierras” liderado por los hermanos Castro, uno de los grupos que ocupa el citado lugar, decidió cerrar el acceso y salida a la comunidad, instalando a sus seguidores en la principal vía. Incluso, este grupo estuvo realizando el cateo a todos los que desean ingresar o salir del lugar. Supuestamente, tomaron la decisión tras una asamblea popular.
Esta medida, sin embargo, estaría buscando el control total de Marina Cue por parte de dicho grupo que pertenece a la comisión vecinal Naranjaty, y evitar que los principales líderes de la Asociación de Familiares de las víctimas, Martina Paredes y Darío Acosta, ingresen a la zona.
El fiscal Lucrecio Cabrera se niega a intervenir en el conflicto, alegando que la tarea preventiva le corresponde a la Policía y no al Ministerio Público. Sin embargo en el lugar ya se cometió una transgresión al producirse el bloqueo de la vía pública. De todas maneras, tampoco los oficiales de la Policía Nacional están interviniendo en pos de apaciguar los ánimos.
El sector de Martina Paredes responsabiliza directamente al fiscal Cabrera del brote del conflicto, debido a su inacción, según lo explicado, considerando que el grupo de los Castro está usurpado la función de la
Policía al catear a los pobladores.
Milciades Paredes, dirigente del lugar, dijo a la Policía que la medida fue adoptada para evitar que los lugareños vendan sus tierras a personas extrañas a la comunidad.
En tanto, el ambiente de hostilidad que se vive en Marina Cue aumenta y los lugareños temen que una nueva tragedia esté en camino, ya que en la propiedad en litigio estarían viviendo personas armadas y peligrosas.
En las últimas horas también el grupo liderado por Martina Paredes y Darío Acosta se instalaron en el lugar, quedando frente a frente con el grupo de los hermanos Castro, en el mismo sector donde había ocurrido la llamada “masacre de Curuguaty”, que terminó en la muerte de 11 campesinos y seis policías.
AYOLAS. Departamento de Misiones. (Miguel Ángel Rodríguez, corresponsal). El bajo caudal del Río Paraná en el puerto de Ayolas, actualmente con 10 cm (la altura normal suele ser de 1,80 m), que se viene registrando desde finales de abril aproximadamente, influye negativamente en la actividad de pesca comercial, rubro que mueve el 80% de la actividad económica local. A esta situación se le tiene que sumar las restricciones sanitarias establecidas por el ministerio de salud y el Gobierno Nacional para hacer frente a la pandemia del coronavirus.
Ambrosio González, propietario de local de venta de pescado y elementos de pesca, señaló que desde hace varias semanas las ventas bajaron mucho, primero porque el Paraná está muy bajo, lo que no permite prácticamente que los pescadores puedan salir a pescar por la gran cantidad de piedras que hay y porque tampoco hay pescado en esta zona.
“Desde hace varias semanas estoy trayendo pescado de la zona de Paso de Patria y Cerrito porque por acá no hay. Traer de otro lado hace que los costos sean altos, porque el gasto es mayor, esto también hace que las ventas sean pocas porque tampoco hay plata, no hay turistas por causa de las restricciones. Lo que se vende es a nivel local y en pequeñas cantidades”, expresó.
Además, agregó que el dorado y surubí tienen un precio de G. 35.000 por kilo, mientras que el pacú, boga y el salmón, s G. 30.000, y el bagre, G. 20.000 el kilo.
A finales de 2020, unos 1.065 pescadores pagaron su licencia de pesca en el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), sede Ayolas. Actualmente 42 pescaderías son las que pagan sus permisos de manera anual. Las mismas están ubicadas en Isla Yasyretá, barrios San José Mí, San Antonio, San José Obrero, las Mercedes, compañía Coratei entre otros puntos de esta ciudad.
El responsable de la Prefectura Naval zona de Ayolas, Emeterio Miranda, manifestó que en el puerto ayolense, los bajos niveles de caudal se vienen registrando desde las primeras semanas de abril, cuando la altura del agua fue de 90 cm, después comenzó el descenso, 40 cm, 20 cm, hasta llegar a los 2 cm, después subió levemente hasta llegar a los 15 cm y terminar hoy entre los 10 y 15 cm.