Habló de persecución, negó tráfico y amenazó con volver
El acusado diputado Carlos Portillo (PLRA) dijo ayer en su defensa que los audios fueron filtrados ilegalmente en el marco de una “persecución política”, con miras a las elecciones internas municipales y partidarias del 20 de junio.
Cayendo en varias contradicciones, dijo que algunos diálogos eran reales, que otros eran falsos o distorsionados y otros mezclas de ambos casos. El legislador destituido participó en la sesión en forma virtual, pero dentro de su oficina legislativa.
Sobre la compra de cargos en Diputados, dijo que su arenga a los funcionarios que pedían nombramientos era real, pero que el pedido de dinero por parte de un legislador cartista, a cambio de un cupo, supuestamente era “falso”. Es decir, que la mitad del audio era verdadero. En este punto varios de sus colegas lo cuestionaron por intentar hacerles creer que algún “comediante” imitó su voz.
Sobre el audio en que se le escucha interceder en un expediente judicial, dijo que solo se limitó a preguntar por carátula, pero que nunca habló con un juez.
En cuanto a la manipulación de encuestas, “dijo que nada de malo hay en eso”. Sobre la parte en que se lo escucha decir “¿Cuántos votos son G. 1.600.000?”, alegó que era una simple negociación a un dirigente de su departamento para trabajar por su imagen en redes sociales.
Sobre el tráfico de influencia en Villarrica, para la terna de cargos en la Defensoría Pública, dijo que el audio filtrado es de mala calidad y distorsionado. Sostuvo que nunca habló con ministros de Corte y con autoridades del ente en cuestión.
Pidió 48 horas para exponer su defensa, pero su moción se rechazó.
Sostuvo que su pérdida de investidura era inconstitucional porque violaba el artículo 36 de la Carta Magna, que protege sus comunicaciones telefónicas. Incluso se comparó con las víctimas de las escuchas de la dictadura Stronista.
Para dilatar el proceso pidió “peritar” los audios y que toda la bancada de Honor Colorado, de 22 miembros, den testimonio que nunca les pidió cupos.
“Yo estoy con la mano limpia. Como decía Domingo Laíno, un gran líder del PLRA, ‘Pueden echarme 1.000 veces si quieren’. Pero les aseguro que gracias a mi pueblo de Alto Paraná, de aquí a un tiempo, voy a volver a esta Cámara y ¿por qué no?, a la Cámara de Senadores ”, advirtió.