Un acierto entre desaciertos
Para el constitucionalista Hugo Estigarribia, el veto del Poder Ejecutivo a la ley de autobandidaje es “un acierto, en un mar de desaciertos” por parte de la gestión del presidente de la República Mario Abdo Benítez. Subrayó que la objeción era lo único que correspondía ante las pretensiones de legisladores que buscaban blindarse con una mayoría difícil de alcanzar en caso de descubrirse tráfico de influencia.
“La intención de ellos fue blindarse, pero su intención viola la Constitución. Es una barbaridad que legisladores legislen para beneficio propio. Violan la Constitución que ellos mismos juraron defender”, agregó.
Estigarribia señaló que la Constitución no establece mayorías para destituir a un parlamentario y que en contrapartida los congresistas intentaron asimilar el número de votos necesarios en un juicio político con un proceso diferente, el de la pérdida de investidura.
Acotó también que la misma Carta Magna establece cuáles artículos deben ser reglamentados por ley, y el artículo 201, sobre la pérdida de investidura, no entraba en este grupo.
También señaló que la supuesta preocupación de los legisladores, sobre sus “derechos procesales”, es infundada.
Indicó que todos estos derechos ya están garantizados en la propia Carta Magna principalmente en que se refiere al derecho a la defensa y otros puntos.