Pese a la demanda, se reúnen
El senador Javier Zacarías Irún (ANR, cartista) hace de todo para convencer a la justicia que él no tiene nada que ver con la presunta malversación cometida por su otrora socio comercial Fernando Román Fernández, pieza clave del escándalo Mocipar junto a Dany Durand, exministro de la Vivienda y exdiputado de Colorado Añetete.
Román Fernández es el hombre con quien Zacarías Irún (ZI) iba de vacaciones a su lujoso departamento ubicado en el edificio Continental de Itapema (Santa Catarina, Brasil), y es o fue también su socio en Gestiones del Este S.A. al igual que en Itapema Constructora S.A., donde los hermanos Javier y el diputado Justo Zacarías Irún (ambos cartistas) eran o son accionistas mayoritarios junto con los hermanos Fernando y Arsenio Román Fernández. En resumen, Javier intenta zafar del escándalo Mocipar. Tanto esfuerzo hace el senador, que en febrero de este año terminó denunciando a su amigo por supuesta lesión de confianza; de esta manera ZI intentaba salvarse de quedar atado al proceso de Mocipar, a través de la primera empresa que figuró a su nombre con su socio Román Fernández.
Después de haber ido ante la justicia a contar el cuento anterior, la realidad es que los hermanos Zacarías Irún continúan reuniéndose con aquel a quien Javier hace apenas tres meses demandó por supuesto hecho punible. El pasado lunes fueron obtenidas filmaciones y fotografías de una reunión en la casa Nº 920 de Esmeralda esquina Las Palmas, ciudad de Lambaré. Hasta allí llegó Román Fernández a bordo de una camioneta Nissan doble cabina, color plata, que figura a su nombre, y se retiró casi dos horas después. Dentro de la casa ya estaba estacionada la lujosa camioneta Land Cruiser que usa Justo Zacarías.