Haitter se despide con sospechosas adjudicaciones
El intendente de Salto del Guairá, Carlos César Haitter (exPDP), a días de su renuncia para dedicarse a la campaña por el rekutu, repartió el presupuesto municipal del 2021 con adjudicaciones directas a su entorno político. Las obras tienen un fuerte tufo a sobrefacturación.
SALTO DEL GUAIRÁ (Rosendo Duarte, corresponsal).
El intendente Carlos César Haitter, aprovechó la situación de pandemia por el covid-19 y, con el apoyo de un grupo de concejales oficialistas, adjudicó por la vía de la excepción para la construcción de dos pabellones de 410 metros cuadrados en total, en el predio del Hospital Regional de Salto del Guairá. La obra es cuestionada por ediles opositores por el hermetismo con que el administrador comunal maneja el proyecto y el abultado costo que consideran exagerado.
La administración municipal destinó G. 3.000 millones para la construcción de los dos pabellones de 205 metros cuadrados cada uno y una planta de oxígeno. Fue adjudicada la empresa de Juan Darío Rolón Ruiz Díaz una de las mimadas de la gestión Haitter, con decenas de contratos.
Los concejales denunciantes indicaron que la Municipalidad pagará G. 1650 millones por los pabellones, que a simple vista son precarios y con valor mucho menor a lo declarado por la administración de Haitter.
La planta de oxígeno que está en el mismo paquete costará G. 950 millones.
Otra licitación “a los apurones” registrada en la página web de la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) es la readecuación de veredas de la avenida principal de esta ciudad. La licitación es por G. 3.230 millones “para la construcción y reparación de aceras, canteros, bordillos y murallas”. En una primera etapa la comuna ya desembolsó G. 900 millones por obras que abarcaron dos cuadras.
Entre las múltiples adjudicaciones figura construcción de empedrado en diferentes barrios, con millonarias adjudicaciones a empresas unipersonales, algunas de ellas denunciadas en plena sesión de la Junta Municipal por el edil Armando García por las groseras fallas en las obras de pavimentación pétrea.
Como broche de oro, además de comprometer todo el presupuesto del 2021, que es de 10 millones de dólares, Haitter pretende endeudar al próximo intendente por G. 70.000 millones con una licitación para la construcción de una planta de tratamiento de agua, realizada en tiempo récord, con apoyo de ocho concejales, sin siquiera contar con borrador del proyecto.
Haitter y concejales leales a su gestión vienen repartiendo obras, en su mayoría por contratación directa o por vía de la excepción, a las mismas empresas. Las firmas operan con dirigentes de barrios, algunos con antecedentes judiciales o procesados, con intención de sacar los mayores beneficios de los recursos municipales para la campaña electoral.
Antecedentes
El intendente tiene varias denuncias penales por presunto mal uso de los recursos municipales. Una de las más graves es la presentada en el 2019 por la Contraloría General de la República (CGR) en la Fiscalía. Se le acusa del supuesto desvío de unos G. 30.000 millones del presupuesto del año 2016.
Haitter ya fue llevado a juicio oral y público por el Ministerio Público por presunto daño patrimonial de G. 1.300 millones a la Municipalidad. Está pendiente de revisión una absolución en primera instancia.
A pesar de las múltiples denuncias el 20 de junio se presentó en los comicios internos para buscar la reelección en octubre próximo, y ganó.