Argentina ya aplica cupo de ingreso a su territorio
Argentina aplica desde ayer una nueva normativa migratoria: solo 600 viajeros por día podrán ingresar al territorio, según el decreto del Gobierno. La medida pretende frenar el ingreso al país de otras variantes del coronavirus, especialmente la delta (India).
La variante Gamma, identificada por primera vez en Brasil, es la predominante en Argentina de acuerdo al último informe de vigilancia genómica de SARS-COV-2, del Ministerio de Salud.
La variante Gamma (Manaos) fue detectada en 89 viajeros que ingresaron desde México, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia y Paraguay.
También, en 55 casos secuenciados de viajeros provenientes de Estados Unidos, México, España, Bangladesh, Panamá y Paraguay, se aisló la variante Alpha (Reino Unido).
Las aerolíneas muestran su descontento con una medida que, afirman, todavía no saben cómo se aplicará.
El vicepresidente para las Américas de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés), Peter Cerdá, afirmó que “tal como está, las compañías aéreas no podrán aplicar la nueva norma”, y destacaron que deberían “informar de cómo se distribuirán las 600 plazas entre aerolíneas”.
“Esto debe hacerse de forma no discriminatoria y transparente, por lo que hemos solicitado una reunión urgente con los responsables”.
Argentina ya puso un tope de 2.000 pasajeros diarios que podían llegar en vuelos internacionales, que ahora se redujo a 600, lo que, según IATA, “obligará a las aerolíneas a dejar en el extranjero a miles de pasajeros, principalmente ciudadanos y residentes argentinos”.
La medida contempla además que los pasajeros deben realizarse un PCR antes de abordar el avión con destino a la Argentina, otro testeo al llegar al país y un tercero al séptimo día de ingreso.
Si el test al ingreso es negativo, deberán realizar el aislamiento donde indiquen las jurisdicciones durante 10 días desde el testeo realizado en el país de origen y un nuevo test para finalizarlo.
Si es positivo: un testeo de secuenciación genómica y aislamiento donde indiquen las autoridades nacionales.
Luego, las jurisdicciones controlarán que quienes regresaron de viaje estén cumpliendo el aislamiento y se radicarán denuncias penales por incumplimientos, por las que se prevén sanciones de prisión de 6 meses a 2 años por violación a medidas contra pandemias y de 15 días a un año por desobediencia a la autoridad pública.