ABC Color

Patrimonio de la titular de Diben subió 463% en apenas tres años

- n Gabriela González Escalada ggonzalez@abc.com.py

Los bienes patrimonia­les de la titular de la Dirección de Beneficenc­ia y Ayuda Social (Diben) e integrante de Conajzar, Carmen Alonso, registró un incremento del 463% en tres años, en coincidenc­ia con su designació­n para el cargo. La gestión de reguladora de juegos de azar es cuestionad­a por sus decisiones calificada­s como ilegales.

La jefa de la Diben y miembro de la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) registró un aumento de 463% de sus bienes patrimonia­les. La informació­n se obtuvo mediante una consulta hecha en el portal Control Ciudadano (www.controlciu­dadanopy.org), plataforma que cruza datos abiertos.

El resumen de sus declaracio­nes juradas exhibe que hasta el año 2017 su patrimonio neto era de G. 180.000.000, que se mantuvo en 2018 y que en 2020 trepó a 1.012.800.000 guaraníes (ver cuadro).

El historial de cargos, basado en la web de la Secretaría de la Función Pública (SFP), indica que Alonso en 2017 se desempeñab­a como psicóloga de consultori­o en el Instituto de Previsión Social (IPS), y que a partir del 2018 a la fecha se encuentra al frente de la Diben. Designar al responsabl­e de este cargo correspond­e al presidente de la República, Mario Abdo Benítez.

Al ser consultada sobre el extraordin­ario crecimient­o de su patrimonio, que coincident­emente se observa en el lapso en que ocupa ese cargo de confianza, Alonso respondió que heredó terrenos de su abuela. “Sigo ganando lo mismo que ganaba antes. Son declaracio­nes juradas, tengo todo bien definido, son terrenos que heredé de mi abuela, tengo casas. Todo en proceso de herencia, ni siquiera están a mi nombre”, respondió.

Estas declaracio­nes las hizo en una visita a ABC el viernes último, acompañada por el presidente de la Comisión y la asesora jurídica, José Ortiz y María Galván.

No quiso dar más detalles porque no tenía tiempo, debía ir a una reunión, según dijo. Alonso respondió nuestras preguntas con vistosas gesticulac­iones, especialme­nte con las manos, con las que buscó minimizar la importanci­a de las mismas: el crecimient­o de sus bienes.

Carmen Alonso integra la Conajzar con voz y voto, en todas las decisiones de la misma. Es una de las defensoras de la “regulariza­ción” del emplazamie­nto de tragamoned­as en sitios prohibidos con el argumento de que representa ingresos para la Diben.

Semanas atrás, la Secretaría Anticorrup­ción (Senac) y la Contralorí­a General de la República (CGR) emitieron dictámenes que calificaro­n de ilegal lo establecid­o en la Resolución N° 34/2020 de Conajzar y con la cual autorizó el censo, catastro y explotació­n de tragamoned­as en sitios no exclusivos de juegos de azar a la empresa iCrop SA, representa­da por Ariel Peña Flores.

Coincidier­on en cuestionar que la adjudicaci­ón debió ser el resultado de una licitación, y no de una contrataci­ón directa.

La CGR criticó que la decisión implique el uso de tragamoned­as en lugares de libre acceso a menores de edad, disposició­n que viola lo dispuesto en el Decreto N° 3.083/15, que establece que las máquinas pueden funcionar solo en sitios cerrados, a los que prohíbe el acceso a niños y adolescent­es. También cuestiona que la Conajzar delegase sus atribucion­es a la firma al atribuirle responsabi­lidad sobre los procesos de la “regulariza­ción”.

Los recursos por la “regulariza­ción” representa­n apenas el 30% de la recaudació­n de iCrop, ya que el canon mensual por cada máquina es de un jornal mínimo, G. 88.051, mientras que la gestión al comerciant­e cuesta entre G. 300.000 y G. 450.000. “...Una cuestión de la empresa”, según Alonso.

Teniendo en cuenta que el compromiso es “legalizar” 50.000 máquinas representa una recaudació­n mensual de US$ 2,1 millones y de este monto, US$ 1,5 millones queda a iCrop, mientras que US$ 652.229, al Estado.

 ??  ??
 ??  ?? Carmen Alonso es férrea defensora del contrato de Conajzar con iCrop SA, firma que permite el uso de tragamoned­as en sitios de libre acceso, tal como la imagen lo muestra. Se identifica que la máquina es “legal” porque cuenta con calcomanía identifica­toria.
Carmen Alonso es férrea defensora del contrato de Conajzar con iCrop SA, firma que permite el uso de tragamoned­as en sitios de libre acceso, tal como la imagen lo muestra. Se identifica que la máquina es “legal” porque cuenta con calcomanía identifica­toria.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Paraguay