Hacienda reconoce que mipymes accedieron al 10% del fideicomiso
El Ministerio de Hacienda reconoció que el Banco Nacional de Fomento (BNF) ejecutó solo el 10% de los US$ 20 millones del fideicomiso para otorgar créditos a mipymes para dinamizar la economía. Por este motivo, el Gobierno analiza ampliar los rubros que puedan acceder a los créditos blandos, mediante un proyecto de ley.
El director de Estudios Económicos del Viceministerio de Economía del Ministerio de Hacienda, José Galeano, informó que hasta el momento el Banco Nacional de Fomentó ejecutó US$ 2 millones de los US$ 20 millones del fideicomiso aprobado con la Ley Nº 6809 “de Consolidación Económica y Contención Social”, promulgada el año pasado. Se trata del plan para asistir a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) más afectadas en pandemia.
De esta manera, reconoció que el Banco Nacional de Fomento (BNF), responsable de administrar los recursos, solo ejecutó el 10%
del fondo destinado para otorgar créditos dirigidos a las empresas citadas y que se dediquen a la gastronomía, turismo, entretenimiento y eventos.
Se trata de préstamos blandos, con entre 2% y 3% de interés a 7 años de plazo y con 3 años de gracia, criterios que permitan a las unidades de negocio mantenerse operativas, sostener empleos y avanzar hacia la reactivación económica. El Estado reconoció la importancia de las mipymes teniendo en cuenta que representa el 90% del tejido empresarial del país y emplea al 70% de la población económicamente activa.
Teniendo en cuenta estas características, el funcionario del Viceministerio de Economía afirmó que se analiza ampliar los rubros beneficiarios de los créditos, pero aclaró que se mantendrá el requisito de tamaño de la empresa establecido para caracterizar a las mipymes.
Comentó que se presentó la propuesta a la Cámara de Diputados y que hay buena receptividad de todos los sectores, incluyendo a los gremios empresariales.
Sistema de evaluación es el problema, afirman
Luis Tavella, presidente de la Federación Paraguaya de las Mipymes (Fedemipymes), manifestó que el principal inconveniente que reportan los socios es el sistema de evaluación que aplica el BNF a los aspirantes.
Señaló que es un crédito a bajo interés y a diez años de plazo, con tres de gracia, por lo que evaluar la situación financiera de la empresa hoy por un préstamo que pagará en el cuarto año no es coherente con la esencia de la ley. El objetivo es que cambie radicalmente la realidad de la empresa, aseveró.
Otro problema que tienen los interesados en los créditos es la excesiva demora de respuesta del banco, entre tres y seis meses, si aprueba o no el crédito, cuando la gente lo necesita para ayer. “Llevamos dos años de pandemia, se sabe que necesitamos dinero para capitalizar y el BNF demora meses en decirte si te va a dar o no el crédito. No es coherente”, lamentó.