Se espera un caos en las oficinas de Gobierno por la falta de planificación
NO SE PREVIÓ TRANSPORTE PÚBLICO EFICIENTE NI TAMPOCO ESTACIONAMIENTOS SUFICIENTES
Cuando las oficinas “fantasma” del Puerto sean ocupadas por los ministerios se espera un caos en la zona debido a la falta de planificación. No se previó transporte público eficiente, tampoco lugares suficientes para estacionar. Hay 2.100 plazas para aparcar, pero por el lugar se moverán 10.000 personas.
Cuando el Gobierno pueda habilitar las oficinas de Gobierno del Puerto de Asunción (las cinco torres que ya están culminadas, pero faltan inversiones para ponerlas a punto). En el lugar trabajarán 6.000 funcionarios públicos a los que deben sumarse unos 4.000 visitantes por día, ya sea para realizar gestiones o para otras cuestiones particulares en los ministerios que funcionarán allí.
Sin embargo, en el lugar prevén solo 2.100 lugares para estacionar, que ni siquiera darían abasto para atender los requerimientos de los empleados que trabajarán en los edificios, muchos menos a los visitantes. Además, tras el fracaso del metrobús, que debía tener una terminal en el Puerto, no hay un plan de transporte público que pueda trasladar a la ciudadanía a esta zona de la capital, por lo que se espera un caos en la zona.
El arquitecto Ricardo Riego, coordinador del proyecto de Reconversión Urbana del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), admitió que saben lo que se viene si no se desarrolla un sistema de transporte que pueda trasladar tanto a los funcionarios como la ciudadanía hasta las oficinas, pero dijo que en este momento no existe una alternativa de solución.
Que el nuevo Gobierno haga las soluciones
Riego agregó que el nuevo Gobierno deberá definir qué se hará ante esta problemática. “Eso (la falta de transporte público) sabemos bien, pero teóricamente todo era un plan maestro que contemplaba la llegada de una terminal grande hasta ahí, en el predio mismo, donde llegarían colectivos. El servicio de metrobús no se concretó, tampoco el ferry, hasta ahora. Lo único que llegó a concretarse es la construcción de las oficinas de gobierno”, explicó Riego.
Cuando se le insistió si el MOPC analiza alternativas de transporte para que la zona no colapse una vez habilitadas las oficinas, el funcionario admitió que no hay un plan y que el contrato del préstamo de las oficinas de gobierno y del fallido metrobús fenecen en junio del próximo año. “El nuevo Gobierno tiene que ver cuáles serán los planes o cómo trazarán sus rutas o caminos en ese sentido”, aseveró.
“Nosotros ya no tenemos la posibilidad de decir vamos a tener plata o si se hará un nuevo préstamo o fuente 10 para financiar esto, no tenemos un panorama en ese sentido”, manifestó el arquitecto Riego.
Sitibús se descartó
En su momento, el MOPC pretendía que ejecutar el plan del Sistema Integrado de Transporte Interurbano (Sitibús), en reemplazo del malogrado metrobús, pero este proyecto también fracasó, porque el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ya no aprobó la prórroga que solicitó el Ministerio de Hacienda para que el MOPC pueda seguir utilizando el préstamo del componente metrobús.
Lo cierto es que hasta ahora no se sabe cómo la ciudadanía se trasladará a la zona de las oficinas ante la falta de transporte público y si lo hacen en sus vehículos, lo más probable es que no encuentren dónde estacionar, que es un problema habitual ante la falta de planificación de las ciudades y la falta de colectivos. El Gobierno actualmente está subsidiando un pésimo sistema de transporte público.
Las obras de las cinco torres para oficinas del gobierno, que fueron erigidas por casi US$ 82 millones en el Puerto de Asunción, están terminadas. El MOPC analiza la recepción provisoria de los edificios, pero los ministerios asignados siguen sin ocuparlos, porque no están equipados ni amoblados, tampoco cuentan con la energía eléctrica necesaria. Por ahora son solo costosas oficinas “fantasmas”.
Los trabajos están a cargo del Consorcio TBI –integrado por las empresas paraguayas Tecnoedil SA, Alberto Barrail e Hijos SA y la Constructora Itasa SA–, que está representado por Carlos María Orué Gusmao, Rolando Ríos Tomboly y Alberto Barrail.
La obra fue adjudicada por G. 478.828 millones (US$ 68 millones al cambio actual), pero el monto del contrato ya se incrementó a G. 574.579 millones (casi US$ 82 millones).