Fiscalía ni olió conexión de Arévalo con universidad que le otorgó título
La Fiscalía desestimó la denuncia contra el presidente del JEM, Orlando Arévalo, por presunto título falso de abogado, aparentemente sin percatarse de la fuerte conexión de la Universidad Leonardo Da Vinci con el diputado cartista. La esposa del legislador colorado y actual concejala de Lambaré, Carolina González, aparecía como la “coordinadora” de varias sedes en el interior del país de la citada casa de estudios.
Como un verdadero bochorno podría calificarse la “investigación” de la fiscala Patricia Sánchez para desestimar la denuncia contra el presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), Orlando Gabriel Arévalo Zielanko, por su presunto título falso de abogado. La representante del Ministerio Público cerró el caso luego de recepcionar algunos documentos de la Universidad Leonardo Da Vinci y tomarle la declaración a tres testigos: Juan Clemente Bareiro Amarilla, un supuesto docente, y Alberto Núñez Godoy y Cirilo Pedrozo Torres, quienes dijeron ser excompañeros.
Lo cierto es que los registros del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) revelaron que el supuesto encargado de impartir clases de derecho a Orlando Arévalo era un profesor de Educación Artística y recientemente titulado como licenciado en Psicología, mientras que los supuestos compañeros eran personas que trabajaban con el diputado
cartista en su Instituto Paraguayo de Educación y Arte (IPEA), uno como su secretario y el otro como una especie de reclutador de alumnos para el instituto y la Universidad Leonardo Da Vinci.
Ahora saltaron nuevos datos en los cuales se evidencian los fuertes vínculos del legislador colorado con
la mencionada casa de estudios terciarios. Y es que la esposa de Arévalo y actual concejala de Lambaré, Carolina González, aparecía como la “coordinadora” y la encargada de visitar las “sedes” en el interior del país del IPEA que tenía “convenio” con la Universidad Leonardo Da Vinci, según evidenció el concejal de Teniente Esteban Martínez y testigo, Cirilo Pedrozo Torres (PLRA).
De manos de Arévalo al MEC
Otros posteos en redes sociales del mismo Pedrozo Torres revelan que la coordinadora de la carrera de la Universidad Leonardo Da Vinci en el aula habilitada en el distrito chaqueño era Noelia Portillo. Esta última, coincidentemente, era otra secretaria del IPEA y se encargaba
de acompañar a la esposa de Arévalo en sus visitas, según la misma también publicó en sus redes sociales en el periodo en que el diputado supuestamente estudió derecho.
Portillo –al igual que el otro secretario de Arévalo y que testificó a su favor, Alberto Núñez Godoy – se ubicó en el MEC en el año 2017. Fue meses después de que el actual presidente del JEM fuera designado director
general de Educación Permanente.
Arévalo ingresó a la cartera educativa en octubre de 2016. Mientras que Portillo consiguió ser nombrada como funcionaria el 17 de marzo de 2017, de acuerdo a los registros.
Portillo logró entrar también con el rubro de profesora de “alfabetización”, a cargo entonces de Arévalo. Lo llamativo es que a su ingreso ocupó cargo de técnico
y desde setiembre del año pasado pasó a ser la directora de la Dirección de Formación del Educador, con esa asignación inicial.
Más curioso es que está al frente de una dependencia encargada de verificar los Institutos de Formación Docente (IFD) que, sugestivamente, en su mayoría son manejados por Arévalo y su esposa a través de la empresa Zielanko SA. Es decir, debe controlar a sus exjefes.