Con la bendición de HC, Benítez Riera es el nuevo titular de la Corte Suprema
Luis María Benítez Riera es el nuevo presidente de la Corte Suprema de Justicia. El nuevo titular cuenta con el apoyo de Honor Colorado para presidir la máxima instancia, con lo que el copamiento del cartismo en los tres poderes del Estado sigue en marcha.
La primera sesión ordinaria del corriente año fue el escenario elegido para designar a Luis María Benítez Riera como titular de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), en reemplazo de César Diesel Junghanns.
Benítez Riera dijo luego en conferencia de prensa que su prioridad será combatir la mora judicial.
Es que, al igual que Diesel, Benítez Riera cuenta con apoyo político del grupo Honor Colorado, con lo que logró imponer su candidatura sobre las de Alberto Martínez Simón y Gustavo Santander Dans, quienes también tenían intenciones de asumir dicha responsabilidad, según fuentes judiciales. La designación de Benítez Riera, quien ya presidió la Corte en el 2011 y en el 2017, fue por unanimidad. Con cinco votos, Santander fue designado vicepresidente primero y Alberto Martínez Simón como vicepresidente segundo, por unanimidad.
El ministro Víctor Ríos postuló para el cargo a su compañero de la sala constitucional Gustavo Santander Dans, quien además del suyo consiguió los votos de Manuel Ramírez Candia, Eugenio Jiménez Rolón y César Garay Zuccolillo.
El Consejo de Superintendencia de la Corte, periodo 2024-2025, quedó integrado de la siguiente manera: presidente: Luis María Benítez Riera (sala penal); vicepresidente primero: Gustavo Santander (sala constitucional) y vicepresidente segundo: Alberto Martínez Simón (sala civil).
Una particularidad que tuvo esta elección es que los votos fueron presentados a viva voz, conforme a una ley vigente que fue promovida por el entonces senador Pedro Santa Cruz y decretada por el expresidente Mario
Abdo Benítez.
Aunque fuentes judiciales indicaron que la presidencia del máximo tribunal era anhelada tanto por Martínez Simón como por Santander Dans y que la designación del segundo como vicepresidente se hizo al solo efecto de “bloquear” la posibilidad de que asuma la presidencia en el próximo periodo (2025-2026), al parecer, los ministros decidieron “lavar los trapos sucios” de manera interna.