Denuncian nuevo ataque de nativos armados en una propiedad invadida
Una comitiva fiscalpolicial fue atacada ayer por indígenas armados en el lugar conocido como barrio Preto o Calle Cue del distrito de Corpus Christi, Dpto. de Canindeyú, según se denunció. El hecho sucedió aproximadamente al mediodía durante una constitución fiscal en el sitio invadido por los nativos. El 8 de febrero ya ocurrió un ataque similar, aunque esa vez quemaron un tractor con sembradora e hirieron al maquinista.
CORPUS CHRISTI, departamento de Canindeyú (Rosendo Duarte, corresponsal). Una comitiva fiscal-policial, acompañada por representantes legales de la citada firma, se constituyó ayer en una propiedad de la empresa Alsa SA, presidida por Walter Huemer. El procedimiento se realizó tras una denuncia realizada por representantes legales de la firma.
El objetivo era constatar la invasión, contabilizar e identificar a los presuntos invasores para luego solicitar el cese de la invasión, según los datos.
Encabezaron el procedimiento
los fiscales Ramón Javier Ferreira, titular de la unidad penal Nº 2; y el fiscal Óscar Paredes, de la unidad penal Nº 3 de la fiscalía zonal de Saltos del Guairá. El contingente policial estuvo encabezado por el comisario Roque Cañete, jefe de Seguridad Ciudadana de Canindeyú; y el comisario Aldo Morel, jefe de la Grupo Especial de Operaciones (GEO).
Sin embargo, cuando la comitiva intentó llegar hasta el fondo de la propiedad, donde estarían alojados los indígenas, empezaron los disparos provenientes de la zona boscosa de la hacienda, por lo que
nuevamente los uniformados y toda la comitiva tuvieron que replegarse, de acuerdo al relato de los denunciantes.
Según la abogada de Michelle Bettancourt, una de las representantes legales de la propiedad invadida, los disparos fueron realizados con armas automáticas y directamente hacia la comitiva, cuyos integrantes milagrosamente resultaron ilesos.
Otro ataque
El pasado 8 de febrero una similar situación se vivió en el sitio cuando una comitiva policial llegó
al lugar luego de que indígenas atacaran a trabajadores de la empresa Alsa SA y quemaran un tractor y una sembradora. En dicha ocasión resultó con herida de bala un tractorista identificado como Luis Alberto López Pesoa.
Se trata de una propiedad que tiene una dimensión total de 1.560 hectáreas, de los cuales unas 970 hectáreas mecanizadas y unas 100 hectáreas de área boscosa fueron las que invadieron los nativos. Reclaman supuestos derechos consuetudinarios sobre dichas tierras.
Los representantes legales, sin embargo, aseguran que los indígenas
están invadiendo todas las propiedades de la zona confabulados con narcotraficantes de quienes estarían recibiendo las armas automáticas para que nadie ingrese en las propiedades donde estarían cultivando marihuana y operando clandestinamente aviones con cargamentos de cocaína.
Tras la cosecha de la soja plantada en el lugar, con resguardo policial, los indígenas prohibieron el ingreso de sus dueños, lo que imposibilitó que se realizara una nueva siembra en el lugar, causando cuantiosas pérdidas económicas a la empresa propietaria.