Rusia vota desde hoy la ratificación de un nuevo mandato para Putin
Rusia vota desde hoy y hasta el domingo 17 en el marco de las elecciones generales, aunque en la práctica es un trámite para la ratificación de un nuevo mandato para el presidente Vladimir Putin. Para el país son los octavos comicios en su historia, para
MOSCÚ (EFE). Estos son los datos claves de estos comicios en suelo ruso y en territorios ucranianos anexionados.
Putin, favorito. El actual jefe de Estado, que llegó al poder el 31 de diciembre de 1999, lleva cuatro mandatos presidenciales con un paréntesis de cuatro años como primer ministro (2008-2012).
Ante la imposibilidad de ejercer más de dos mandatos presidenciales consecutivos, reformó en 2020 la Constitución aprovechando la confusión creada por la pandemia del coronavirus. Ahora podrá presentarse a la reelección este domingo y en 2030.
Putin podría lograr su mayor victoria electoral con más del 80% de los votos, según los sondeos.
Soldados y anexionados. Más de 112 millones de rusos –1,89 millones en el extranjero– están llamados a las urnas. Por primera vez en las presidenciales votarán los habitantes de las zonas ocupadas por el ejército ruso en las cuatro regiones anexionadas (Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia).
Además, también votarán en territorio ucraniano los más de 600.000 soldados desplegados en la zona de la llamada operación militar especial.
Sin oposición real. Además de Putin, sólo tres candidatos concurrirán a las elecciones. El comunista Nikolái Jaritónov, el ultranacionalista Leonid Slutski y el presunto liberal Vladislav Davankov, cuya intención de voto no supera el 6%.
El único aspirante opositor, Boris Nadezhdin, no fue registrado, pese a recolectar el doble de las firmas necesarias -100.000-, por defectos de forma.
En ausencia de Navalni.
Las elecciones transcurrirán un mes después de la muerte del principal enemigo del Kremlin, Alexéi Navalni, que falleció súbitamente entre rejas, de lo que la familia, sus correligionarios y Occidente acusan directamente a Putin.
Las autoridades penitenciarias le enviaron a una prisión en el círculo polar ártico después de que el líder ruso presentara su candidatura y de que el opositor anunciara una campaña contra la reelección del presidente.
Votantes electrónicos. Por primera vez, un tercio de los electores rusos -unos 38 millones- podrán votar electrónicamente.
Los observadores independientes consideran que el voto electrónico es, en realidad, un instrumento de fraude oficialista debido a la opacidad del escrutinio, como ya ocurrió en los comicios municipales de 2021.
A este se suma la posibilidad
de votar durante tres días, opción que la oposición al Kremlin cree que fomenta el empleo masivo del recurso administrativo para obligar a los rusos que trabajan para el Estado a votar a favor de Putin.
Sin observadores occidentales. Rusia celebra los comicios a espaldas de Occidente.
El país invitó a cerca de 1.000 observadores internacionales, pero a ninguna de las organizaciones europeas que supervisan la limpieza de las elecciones en el continente.
Todo ello eleva el riesgo de que Occidente no reconozca los resultados de estas elecciones.