¿Reflotar Corpus o pagar deuda en Yacyretá reclamadas por Paraguay?
En Argentina, al menos en publicaciones periodísticas, optaron por reflotar el tercer proyecto hidroeléctrico paraguayo-argentino sobre el río Paraná, sin definir la suerte del segundo, semiparalizado hoy por falta de financiamiento.
¿En la agenda de prioridades del Gobierno nacional, el tercer proyecto –Corpus o Pindo’i– ocupa el primer lugar? ¿O el segundo plan, la central del brazo Aña Cuá?
La realidad del actual Gobierno paraguayo e inclusive la que soportó su predecesor, vocifera un no rotundo a estas preguntas.
En Yacyretá, el primero de los proyectos de referencia, el Gobierno de Mario Abdo reclamaba a su par argentino (Alberto Fernández) el pago de sus acreencias en concepto de compensación por Cesión de Energía.
El gobierno que le sucedió, el de
Santiago Peña, obligado por sus atendibles y entendibles urgencias presupuestarias, sigue haciendo lo mismo que su predecesor.
A la deuda argentina, porque su sistema interconectado aprovecha el excedente paraguayo en Yacyretá, pese a que el Tratado solo le confiere el “derecho preferencial de adquisición”, se suman los reclamos de los responsables de turno de las obras, obligaciones, operación, etc. en la entidad binacional en la margen derecha del río Paraná.
En la lista de prioridades de la margen paraguaya en Yacyretá, los hechos cotidianos así lo confirman, aparecen otras urgencias, como la revisión del Anexo C del Tratado de Yacyretá, una obligación que ya acumula 10 años de atraso, “beneficioso” para nuestros socios.
En esa revisión, entre las urgencias no aparece Corpus, sino limpiar la contaminada deuda imputada a la entidad binacional; así como de las perjudiciales secuelas de una de las Notas Reversal del 9 de enero de 1992, la que inclusive había sido rechazada por el Parlamento paraguayo y, si algún saldo queda, distribuirlo tal como lo establece el numeral IX del Anexo C, en proporción a las potencias contratadas por las entidades de ambos países.
Recordemos que en casi 30 años de producción de la central, el sistema argentino succionó el 93% de su energía, en tanto que el paraguayo se conformó con apenas el 7%.
En escala siguiente, emerge otra urgencia paraguaya, la deuda de la entidad binacional con el Paraguay en razón de territorio inundado, cuyo monto ya supera largamente los US$ 1000 millones.
Ramón Casco Carreras