El plan saudí para tener los edificios más grandes del mundo
La megaciudad Neom tendrá ● descomunales construcciones que podrían superar a los rascacielos más altos El proyecto del príncipe heredero ● Mohammed bin Salman busca cambiarle el rostro a su país.
Arabia Saudí ha puesto sus ojos en un nuevo récord. En más de uno, en realidad. El reino sunita lleva varios años promocionando el proyecto de una megaciudad futurista llamada Neom. Erigida en medio del desierto, la megápolis equipada con robots domésticos y taxis voladores se presenta como una ciudad inteligente que adopta todo tipo de tecnologías y en la que destacan los edificios más grandes y altos del mundo. “La nueva era del progreso humano”, se puede leer en su página web junto a imágenes dignas de una película de ciencia ficción.
La ciudad de US$500 mil millones, d escrita como“el Sili con Valley saudí ”, es la apuesta más ambiciosa del príncipe heredero y gobernante de facto Mohammed bin Salman (MBS) para convertir una región remota del país en un estado semiautónomo de alta tecnología y en un destino turístico de alto perfil. Detrás del proyecto, anunciado en el 2017, está el deseo de atraer inversiones extranjera sal reino y ayudar a diversificar su economía dependiente del petróleo.
Según el plan, Neom, cuya primera etapa de construcción está prevista que se complete en el 2025, ocupará un área total de más de 26.500 km cuadrados en la provincia de Tabuk, en el noroeste de Arabia Saudí, con lo que se espera que cubra un área 33 veces mayor que la de la ciudad de Nueva York.
La columna vertebral del proyecto serán dos rascacielos de hasta 500 metros de altura que se extenderán horizontalmente y de forma lineal por decenas de kilómetros desde la costa del mar Rojo hasta el desierto, albergando espacios residenciales, oficinas y comercios. El informe oficial del proyecto afirma que será el mayor edificio del mundo, no en términos de altura, sino de superficie total.
El país también había comenzado a trabajar en el 2013 en la Torre de Jeddah, que con una altura de un kilómetro se preparaba para superar al edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa de Dubái. Pero su construcción está estancada desde el 2019 por problemas laborales.
—Nueva imagen—
Desde que fue designado
príncipe heredero en el 2017, MBS ha querido modernizar a Arabia Saudí aumentando la apertura del reino ultraconservador a la cultura y al turismo y liberando algunos aspectos de la sociedad saudí.
Sin embargo, los esfuerzos del príncipe por modernizar la imagen del reino fueron socavados por la muerte de Jamal Khashoggi, un periodista críticoco nelGobiern oque fuebr utalmente asesinado por agentes saudíes en el consulado de su país en Estambul (Turquía) en el 2018.
Para Mohamed Badine el Yattioui, profesor de Relaciones Internacionales en la American U ni ver sityint he E mirates, proyectos como Neom ayudan al príncipe a retomar el rumbo que desea. “Se trata de una ciudad totalmente nueva, muy moderna, que podría establecer un contra peso a ciudades comoDubái,e nE miratos Árabes Unidos, y Do ha, la capital de Qatar. Esas dos ciudades, sobre todo Dubái, son las más importantes del Medio Oriente en materia de economía, turismo y modernidad”, manifiesta a El Comercio.
–Puntos de choque
Enfatiza el objetivo de fortalecer la economía a través de la diversificación de los sectores turístico, financiero y mediático. Agrega que MBS ha buscado cambiar de forma autoritaria la imagen ultra conservador a de Arabia Saudí, lo que ha generado conflictos dentro de la familia real, sobre todo con miembros con una visión más cerrada y conservadora y con el poder religioso.
“Hay temor de que la imagen del reino saudí cambie. Los dos lugares más sagrados del islam, La Meca y Medina, están en Arabia Saudí. El temor de parte de la sociedad y del poder político y religioso es que la sociedad saudí se abra tanto que los valores tradicionales y conservadores desaparezcan”, apunta el experto.
Explica también que las dudas sobre el proyecto se centran en si el país tendrá la capacidad de hacer una ciudad tan moderna y ambiciosa en poco tiempo, ya que la megaciudad debería estar lista en el 2030.