Capturan a implicados en la muerte de policía en Juliaca
Suboficial falleció carbonizado durante protestas ocurridas en Puno el 9 de enero.
Agentes de la División de Investigación y Homicidios de la Dirincri detuvieron a dos implicados en la muerte del suboficial PNP Luis Soncco Quispe, ocurrida el pasado 9 de enero durante las protestas sociales en la ciudad de Juliaca (Puno).
SetratadeErusbelJhonatanApazaUturuncoeIsmael Franklin Díaz Ccallata. Ambos fueron detenidos por un equipo policial especial de Lima que viajó hacia Juliaca para investigar el caso. Estos sujetos también son señalados por las autoridades como causantes de las graves lesiones que recibió el suboficial PNP Ronal Villasante Toque, quien acompañaba a la víctima.
En la vivienda donde fueron detenidos ambos sospechosos, se encontraron una cacerina de fusil AKM, accesorios de un arma de fuego y más de 23 mil dólares en efectivo. También se halló el arma de fuego del policía fallecido.
Asimismo, en ese inmueble se detuvo a Yesenia Molina, quien sería la conviviente de Apaza Uturunco.
De acuerdo con las investigaciones policiales, el agente Soncco Quispe, de 29 años,oriundodelaprovincia de Canas, en la región Cusco, fue sorprendido el pasado 9 de enero por una turba de manifestantes, que lo atacó a golpes y luego le prendió fuego cuando se encontraba inconsciente.
Los dos policías que lo acompañaban, Ronal Villasante Toque –pese a estar herido– y Esteban Barrientos Chayna, lograron huir y pedir ayuda. El hecho ocurrió cerca de la medianoche en la urbanización Tambopata.
Según se informó, el efectivo fallecido tenía cinco años de servicio en la PNP de la ciudad de Juliaca. Días
antes de su deceso, había sido ascendido a suboficial de segunda.
“Eramuycariñosoconmigo, tenía cinco años en la policía y siempre se desempeñó con eficiencia y honestidad. Estoy muy mal, mi corazón está partido”, manifestó la madre del policía luego de conocer lo ocurrido.
Los restos del agente fueron llevados hasta su tierra natal ubicada en la comunidad campesina de Qollori, en la provincia cusqueña de Canas, para su cristiana sepultura.